Después de tres años de sequía, Shakira vuelve con nuevo disco, "El Dorado", metáfora de la felicidad y del reencuentro con una inspiración esquiva para quien hubo de hallar el equilibrio entre sus facetas artística y personal. "Para mí lo primordial en mi vida es mi familia, el amor, la salud... Lo demás no tiene tanto peso, aunque adoro crear, sobre todo ahora que lo he hecho no como en otros trabajos, en los que me autoexigí demasiado. Quizá porque ser madre es ahora mi trabajo fundamental, el más duro, pero también el más satisfactorio, y entrar en el estudio se ha convertido en un hobby", relata.

"'El Dorado' es la inspiración. Me he podido reencontrar con ella cuando creía que se había escapado, cuando pensé que hacer canciones otra vez era una tarea casi imposible. Para ello, el apoyo de mi familia fue básico", comenta. Las tres primeras semanas fueron las peores. "Tuve que encontrar la armonía entre mi mundo físico, el intelectual y el de madre. Todo entró en algún momento en conflicto, pero cuando pude sortearlo y sobreponerme, empezaron a llegar las canciones", añade.