La Nave Boetticher de Madrid acogió anoche una doble presentación con sabor asturiano. La diseñadora María Lafuente presentó en ese espacio su nueva colección de moda, "Sororidad" . Una línea "sostenible y comprometida, con una puesta en escena impactante", tal y como había adelantado la diseñadora a LA NUEVA ESPAÑA.

Además del talento de Lafuente, las prendas de la colección se nutren de su colaboración con otro asturiano: el artista plástico César Barrio, que aplica a las prendas técnicas especiales para darles un toque estético singular para que logren transmitir "el mensaje del agua".

"La colaboración pictórica con María Lafuente permite siempre sacar de contexto las vías de trabajo que surgen en el estudio, cambiando su centro de gravedad hacia una forma de performance mucho más libre en la realización de telas. En consonancia con la forma de trabajar totalmente fellinesca de la diseñadora: unir arte y vida en el proceso creativo", reflexiona Barrio, que ya había colaborado con la diseñadora en otras colecciones como la anterior "Código rojo". "En esta serie en concreto el punto de partida es el agua, continuando y rompiendo a la vez estéticamente con la serie anterior Código rojo sobre el fuego", explica Barrio.

Desde este punto de partida, ambos creadores profundizan en sus respectivos artes, logrando una sugerente mixtura de formas y colores. "Las connotaciones que surgen como estratos interconectados a distintos niveles van desde el cambio climático y cambios sociales que nos afectan hasta la necesidad de una mirada nueva basada en las ensoñaciones antropológicas que produce este elemento. Somos la continuación del latido primigenio de los océanos", asegura Barrio.

Acompañando al desfile, el artista plástico presentó en ese mismo recinto la serie "Rituales del imaginario". Un conjunto de cinco obras de gran formato (cinco metros de largo por dos y medio de alto) realizadas en una residencia artística en Aranzazu. Unas piezas que sólo se pudieron ver durante el desfile de modelos, completando la lectura estética de la colección al crear una escenografía conectada con las prendas.