"En un país multicolor...", decía la canción de la famosa abeja Maya. Y es precisamente ese entorno, esa explosión de color, la que ha protagonizado la mayoría de desfiles de la semana de la moda de Milán, que ha bajado esta semana la persiana de su última edición, en la que las firmas y diseñadores han presentado sus propuestas para el invierno 2018-2019.
Prada, Marni, Versace, Gucci, Dolce&Gabanna son algunas de las firmas de cabecera, dentro de la moda italiana y en el mundo entero, que han demostrado que el color es el mejor aliado para vencerle el pulso al gris invernal. En looks monocolor en tonos flúor, rindiéndose a la paleta de colores pastel o mezclándolo todo con resultados sorprendentemente inspiradores. Esta idea también confirma que la superposición de prendas y capas, en diferentes tejidos y largos, es la mejor forma de enfrentarse al frío el próximo invierno. ¿Cómo? Con abrigos y chaquetas de estilo motero oversize, con trench de tejidos plastificados, con prendas de lana amplias? Las opciones son infinitas.
Los estampados animales siguen siendo los favoritos en las propuestas invernales. En trench, en faldas, en vestidos y en blusas. También los cuadros, que aparecen en trajes de chaqueta con los hombros marcados, acompañados de faldas "midi" tipo pareo o con "minis" tableadas, al más puro estilo "high school".
Las referencias a mundos infantiles, fantásticos o costumbristas han sido una constante en la pasarela milanesa. Así, se han podido ver a modelos con la cara pintada con colores intensos en Moschino; dragones, cabezas y logos de empresas de ficción en Gucci; y perros en Tod's.
Los acabados metalizados siguen pisando fuerte, tanto en looks de día, como por ejemplo en botas camperas o cazadoras tipo biker; como en los de noche, con vestidos cortos o tops de lentejuelas. Los lazos ponen el punto "pretty" a los vestidos y las blusas, cerrando los cuellos, adornando las mangas o simplemente como adorno.
La inspiración ochentera sigue viva, tanto por las siluetas que concentran el protagonismo en la zona de los hombros como por la presencia de leggings brillantes, chaquetas sport con cremallera tipo baseball y looks rockeros, como los que recorrieron las pistas de fórmula 1 en el desfile de Tommy Hilfiger, que se celebró esta vez en la ciudad italiana. Y, aunque hay espacio para los vestidos ajustados y algunas propuestas que marcan las líneas del cuerpo, la tendencia son prendas que desdibujen la silueta. Tejidos que fluyan y que permitan moverse con facilidad tanto en el día como en la noche.
El rojo es uno de los colores dominantes en la paleta del próximo invierno. Tanto solo como acompañado por otro color, mezclas de varios tonos y "mix" de estampados. Aunque muchos diseñadores siguen conservando el negro como su as bajo la manga, los azules, los mostaza, los naranjas y los rosas, en diferentes versiones, se apoderarán los armarios.
