Pipi Estrada no tiene pensado callarse su opinión acerca de la actual edición de "Supervivientes", el programa de telerrealidad en el que él participó hace años "cuando era tan auténtico" y no "la bazofia" en la que, según él, se ha convertido. "Es vomitivo", ha asegurado el periodista deportivo asturiano, gran conocedor de Telecinco, canal que emite el "reality" que pone a prueba a famosos en los Cayos Cochinos de Honduras y para el que ha colaborado en numerosas ocasiones el gijonés, que ha caminado a medias entre lo deportivo y la farándula.

Estrada lo tiene claro: en "Supervivientes 2018" hay tongo. Y él mismo ha reforzado su propia teoría al adivinar quién sería expulsada en la última gala del concurso. "¿Alguien tiene dudas de que la expulsada será Mayte Zaldívar? La sospechosa productora 'Bulldog TV' manipula los votos y por eso se queda Sofia (Suescun) para escupir basura", vaticinó el pasado jueves 29 de marzo.

Dicho y hecho: la exmujer de Julián Muñoz fue la expulsada, salvándose la exganadora de Gran Hermano, cuya actitud en el programa, levantando frentes en la convivencia por todos los lados, es muy polémica. El siguiente "tuit" de Pipi Estrada estaba claro: "Jajaja".

Pero no ha sido su única publicación contra el programa de Telecinco. "Esta bazofia debería llamarse 'Superliantes', subvencionado por 'Sálvame', y no 'Supervivientes'; esto ya no es el concurso tan auténtico que yo viví en mi edición; ahora es vomitivo", ha manifestado también a través de Twitter.

Pipi Estrada en estado puro: algunos le dan la razón y otros le critican acusándole de querer atacar a Telecinco por haber prescindido de él en sus programas. No deja indiferente a nadie.

Radical en su postura

El periodista deportivo asturiano insiste, con declaraciones, en sus críticas y compara la actual edición de "Supervivientes" a la de 2006, la que él vivió como concursante: "No tiene nada que ver, jamás nos hubiesen llevado a nadie a la isla: ni a la novia, ni a un novio, ni a nadie de fuera. Las reglas del juego eran otras, más duras: yo tenía un pelo enquistado y el culo como un mandril, tuve que pedir, bajo mi responsabilidad, antibióticos y me cosieron en la zona perineal sin anestesia... No podías hablar con nadie de fuera desde allí: ahora aquello es una conversación constante, los concursantes hablan con el padre, la madre y el espíritu santo... Como digo yo, el concurso ahora está muy 'salvamizado', no premia la aventura y el esfuerzo, ahora se trata de aventuras amorosas, de ser 'superliantes' y no supervivientes".

Tampoco se retracta, ni mucho menos, de sus acusaciones sobre la manipulación de votos de la audiencia. "La nueva productora (Bulldog) está bajo sospecha, es muy oscura y siniestra: tiene problemas económicos y quieren salvar esto como sea. Por ejemplo, no quieren que se vaya la gitana (Saray Montoya) o que la echen porque hay un potencial enorme con las muchas personas que conforman la etnia gitana en este país", argumenta Estrada.

También rebate a aquellos que creen que alza la voz contra "Supervivientes" por despecho con Telecinco. "Que me digan en qué me equivoco en los comentarios que hago. Si yo quisiese ir a Telecinco estaría siendo muy torpe utilizando esta táctica. Lo lógico para buscar una silla en 'Sálvame' es hacer la pelota y arrastrarse como hacen muchos, como el caso de 'Rata' (Rafa) Mora, un indigente intelectual que se cree que la televisión es dar voces e insultar, pero también hay que tener argumentos; y los suyos son los de un loco gritando en el desierto", sentencia el periodista asturiano.