A sus 39 años, lleva 27 siendo una figura pública, desde que empezó su carrera profesional siendo todavía una niña. Ahora la top se sincera sobre su vida personal en una entrevista a Vanity Fair desde su residencia en París, con un divorcio a sus espaldas y un hijo de seis años.
Inés Sastre asegura que ahora está preparada para volver a la escena pública y al cine, "mi gran papel es hoy, ahora mismo". Por primera vez habla de los motivos del fracaso de su matrimonio con el empresario italiano Alex Corrías: "A veces el nacimiento de un niño supera las expectativas de uno. Los hijos unen y desunen".
También asegura que es difícil criar a un hijo en una familia monoparental: "Vino así. Uno se apaña con lo que tiene. Yo por lo menos tengo una buena relación con Alex Corrías". A pesar de todo asegura que hubiera preferido educar a Diego en pareja: "Por supuesto que me hubiese gustado no estar sola. Creo que mi ex marido aprenderá a ser un padre por el bien del niño, porque es lo más precioso".
Aunque dice no saber las cualidades que busca en una pareja, da algunas pistas sobre el hombre que busca ahora: "Llevo muchos años dirigiendo mi vida, me gustaría que alguien me llevase con un poco de mano izquierda. Hay cosas que he sabido hacer muy bien y hay cosas que necesito aprender".
Su íntimo amigo, el gestor de grandes patrimonios Felipe Rein Gómez-Acebo también habla en la entrevista. Asegura que el inglés Giles Thornton, asesinado en Kenia en 1998, fue uno de los grandes amores de Inés: "Fue un gran golpe para ella. Le costó mucho superarlo". Respecto a su supuesto rol de cazafortunas, Felipe asegura: "Es exactamente lo contrario. El balance general es que si alguien ha estado pagando las cuentas, es ella".
Sobre su estado sentimental actual, Inés Sastre dice: "Mi novio actual es divino. Esperemos que sea él".
