La curiosidad que tienen los perros por oler y probarlo todo hace que, muchas veces, se acerquen o ingieran algunos productos que son veneno para su organismo.

Es importante saber las medidas que se pueden tomar para que su amigo no sufra daños demasiado fuertes. También es básico que pueda detectar los síntomas del envenenamiento tales como náuseas y vómitos, diarrea, demasiadas babas, dificultad para moverse con normalidad, respiración entrecortada, inflamaciones en el rostro o en el hocico, falta de apetito, sarpullido en la piel, actitud apática y con poca energía o convulsiones o espasmos musculares.

Le dejamos unas pautas a seguir si se le plantea un caso de envenenamiento en su compañero. Debe contactar con un veterinario para evitar actuciones erróneas.

-Provocarle o no el vómito: debe saber que si la sustancia que ha ingerido su mascota es tóxica, vomitar le podría afectar a otras zonas del cuerpo. Si desconoce la causa de la intoxicación es mejor que no lo ihaga. Para lograr el vómito puede darle 2-5 ml de agua oxigenada vía oral o también se le puede dar a beber agua con sal.

-Si el producto que intoxicó a su mascota está en la piel, debe eliminar los excesos con un baño con abundante agua tibia y jabón para quitar los rastros que hayan quedado en su cuerpo.

-Ofrézcale mucha agua: así conseguirá que el perro elimine las toxinas por la orina y lo ayudará a mantenerle hidratado. No le de leche ni lácteos, la grasa de estos productos hace que la absorción del veneno sea mayor y, por tanto, el estado de salud de tu mascota empeore.

-Pastillas de carbón vegetal: se trata de unos fármacos que ayudarán a evitar que el veneno se absorba.

-En caso de intoxicación por inhalación debe llevar a su perro a un lugar muy ventilado.