El ´efecto calcetín´ está generado por el auge del estilo "casual-chic", el que ha extendido el relajado "casual-friday" al resto de los días de la semana, y que ha impreso la etiqueta "trendy" a los accesorios del día a día.

Este complemento también ha estado marcado por el auge del "feísmo", una tendencia que reelabora los códigos de estética "friki" y que ha catapultado a la pasarela lo que antes era tachado de "hortera".

Relegado durante años tras el largo del pantalón o reducido a la mínima expresión dentro de los zapatos, el calcetín sale de su ostracismo transformado en un amplio abanico de opciones con el objetivo de conquistar a los más "fashionistas" más reticentes a esta nueva tendencia.

Firmas como Red Valentino, Hermes, Chanel, Trusardi, Ralph Lauren, Alberta Ferreti o Marni han adoptado este accesorio como parte fundamental de sus propuestas, en diverso estilo, desde el toque rockabilly años 50 de calcetines con ribete y zapatos de tacón, a la juvenil temática "college" de calcetín más mocasín.

Y es que el diseño de este complemento no se reduce al ejecutivo de rombos o al "pack" de calcetines deportivos de raya azul y roja, que generaciones pasadas han combinado con tan poca precisión. Un amplio abanico de propuestas se abre paso este otoño en nuestros armarios.

También denominados calzas, medias o calcetas, este accesorio encarna tantos largos como gustos del consumidor: de caña alta, caña baja, tobilleros o el bautizado como ´old school´ -hasta la rodilla y rematado con dos rayas-, el abanico de opciones es ilimitado y sus combinaciones infinitas.

Zapato de salón: Este conservador y sofisticado calzado admite tantos calcetines como gustos de su propietaria, combinado con calcetín-media hasta la rodilla rebaja su etiqueta conservadora, y con el clásico calcetín de hilo tobillero, incorpora un toque divertido al atuendo de trabajo.

Mocasín inglés: este modelo vetusto y clásico también tolera múltiples estilos dependiendo del calcetín empleado, no es lo mismo una conservadora y oscura media que se mimetiza con el tono del pantalón, que un colorido calcetín a rallas o ácidos tonos que da un toque de humor y destaca hasta en la combinación más seria.

Botas: El atuendo que se emplea en equitación ha marcado estilo y la pasarela lo ha adoptado en las propuestas inspiradas en la campiña inglesa, el tándem botas de montar en tonos oscuros y calcetín a ras de rodilla en vivos colores, será una de las estrellas del otoño.

Sandalias: Solo para los más atrevidos. El dúo friki por excelencia, formado por sandalia y calcetín, ha conseguido subirse a la pasarela como una arriesgada apuesta que da la puntilla a los amantes de la estética "folk".

Decía Yves Saint Laurent que "un buen diseño puede soportar la moda de 10 años". El tiempo dirá si el calcetín aguanta a la vista más de una década o es una tendencia más de las que aparece y desaparece con pasmosa facilidad.