Siri fue el pionero de los asistentes de voz móviles y su utilidad facilita algunas de las formas en las que se interactúa con los iPhone. Sin embargo, el sistema no es perfecto y en ocasiones da lugar a situaciones peculiares.

Aunque existen muchas formas de poner a prueba a la utilidad de Apple, hay algunas más insólitas que otras. Guillem, un niño de cuatro años, exploró a su manera los límites del asistente, como se puede escuchar en un audio grabado por sus padres.

En la grabación, que ha emitido Cadena 100, Guillem pide primero a Siri que cante, pero el programa de Apple le corta con un seco "no sé cantar". Y cuando el niño pregunta por 'CantaJuego' de 'El sapo Pepe', el móvil le contesta: "Mira lo que he encontrado en internet sobre Pepe".

Después, el pequeño pide una llamada y, cuando Siri le pregunta con quién quiere hablar, le aclara que "con la yaya". El asistente no entiende, pero el pequeño insiste: "Mi yaya Mari Carmen, ¿no te acuerdas?". El teléfono sigue sin dar con el contacto, pero ya sabe que se trata de la abuela del niño y trata de ser útil: "No veo a 'y', 'y' en tus contactos. ¿Cómo se llama tu abuela?". "Mari Carmen se llama mi abuela", dice el niño ante el iPhone, que sigue sin "ver" a Mari Carmen en los contactos.

El diálogo aún se prolonga unos segundos más con malentendidos igual de cómicos, aunque Siri parece limar asperezas preguntando al pequeño si quiere que le llame Guillem.

Este experimento doméstico sirve para ilustrar los límites de los asistentes virtuales, pero seguramente que también para que Apple o el resto de sistemas que los integran puedan seguir mejorando su desarrollo.