Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

El ayudante asturiano de Marcelo Bielsa en la selección uruguaya recibe el calor de su gente en Vegadeo

Diego Bermúdez, asistente en el cuerpo técnico del combinado nacional charrúa, será distinguido con el premio a los valores humanos que otorga la peña madridista "Mazo del Suarón"

El entrenador vegadense, que ya trabajó a las órdenes del argentino en el Leeds, elogia su capacidad de "esfuerzo, trabajo y convicción"

Diego Bermúdez, antes del partido de cuartos de final de la pasada Copa América entre Uruguay y Brasil.

Diego Bermúdez, antes del partido de cuartos de final de la pasada Copa América entre Uruguay y Brasil.

En 2008, dos años antes del Mundial de Sudáfrica, un joven de Vegadeo con pasión por el fútbol se sentó a ver un partido amistoso entre España y Chile. Era la España que estaba a punto de ser campeona del mundo y ganó 3-0, pero a esa ya la conocía. Lo que le asombró aquel día fue “la intensidad, la valentía y el descaro” de los chilenos, que despertaron un impulso por saber más sobre su entrenador que acabaría por cambiarle la vida. “Descubrí que era una persona que apenas tenía un pasado como jugador profesional, que su carrera era en gran medida el resultado del esfuerzo, el trabajo y la convicción y eso me hizo pensar que yo también podía trabajar sobre esas tres cualidades y llegar al fútbol profesional”. El seleccionador era Marcelo Bielsa; el que habla, el chaval de Vegadeo, es Diego Bermúdez Fernández, que, dicho y hecho, ahora trabaja como asistente a las órdenes del entrenador argentino en el cuerpo técnico de la selección de Uruguay.

Los que saben cuánto le ha costado llegar hasta allí, sus vecinos de Vegadeo, reconocen hoy a Bermúdez con el premio a los valores humanos que cada año otorga la peña madridista “Mazo del Suarón” y que el entrenador recibirá coincidiendo con el XIV “Churrasco” en la plaza de la localidad vegadense de Meredo, programado para las dos y media de la tarde de este sábado. “Es la gente que me conoce antes de trabajar en el fútbol y eso aumenta el valor del reconocimiento”, señala con gratitud el homenajeado, “porque saben que detrás de lo que se va consiguiendo hay mucho trabajo, muchos sacrificios y ambición”.

La carrera deportiva de Bermúdez (Vegadeo, 1987) comienza y termina, de momento, en torno a la figura muy carismática de Marcelo Bielsa. En 2011, Unos pocos años después de la revelación de aquel España-Chile, el técnico argentino dio con sus huesos en el banquillo del Athletic de Bilbao y Bermúdez, que para entonces ya había leído y estudiado por su cuenta, consiguió una cita para visitarle en Lezama. “Cuando supe la fecha y el partido que jugarían esa semana”, recuerda, “hice un análisis del rival, que era el Real Zaragoza, y se lo entregué. Él lo revisó y me permitió hacer lo mismo con el suyo. Luego volvimos a hablar sobre ese trabajo y me puso en contacto con un miembro de su cuerpo técnico…” Ellos todavía no lo sabían, pero habían iniciado una relación profesional que dura hasta el presente. Mientras Bielsa probaba suerte en Francia, en el Olympique de Marsella y el Lille, Diego Bermúdez seguía formándose, en contacto con el equipo del “Loco” Bielsa, pero también por su cuenta. Se hizo técnico superior de Actividades Físicas, se graduó en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte en la Universidad de Vigo, hizo un posgrado en Análisis del Juego y un máster en Dirección de Proyectos y se sacó el título de entrenador. El estudiante mediocre empezó a sacar sobresalientes y en 2019, Bielsa le incorporó al cuerpo técnico con el que llevó al histórico Leeds United de vuelta a la Premier League inglesa.

Diego Bermúdez, en su etapa en el Leeds.

Diego Bermúdez, en su etapa en el Leeds. / .

Desde 2023, también forma parte del equipo que el entrenador argentino se llevó a su siguiente destino, la selección de Uruguay, tercera clasificada en la Copa América de este verano. No tiene aquí la adrenalina del día a día, pero a cambio puede vivir en Asturias y desplazarse a partidos y concentraciones… Su trabajo en la selección se bifurca en dos bloques, uno vinculado al perfeccionamiento de la metodología de entrenamiento y otro con las charlas que se dan a los jugadores y los videos que se les muestran. “Se trata buscar la mejor forma de transmitir conceptos a través del vídeo usando diferentes programas que permiten aumentar su potencial didáctico para poder trasladar al jugador más conceptos y más claros”, explica.

¿Y el futuro? “Es difícil anticipar algo en el fútbol”, contesta, y de momento “solo pienso en seguir trabajando como hasta ahora. Obviamente tengo el sueño intacto de ser entrenador y me centro en mejorar con ese fin en mente. Lo importante es no detenerse y mantenerse humilde para ser consciente de la necesidad de seguir trabajando duro”.

Tracking Pixel Contents