Unanimidad en un clamor que suena en todo el mundo: “La sidra ye mundial”

Con los centros asturianos de todo el mundo iluminados de verde botella, la Asturias de la emigración convierte en un clamor internacional la felicitación a la cultura sidrera por su reconocimiento como Inmaterial de la Humanidad. Desde la Patagonia argentina, "el sur del mundo", hasta todos los rincones del planeta, en todos los puntos cardinales hay asturianos que celebran la nueva etiqueta que adorna desde hoy las botellas de una bebida que, ahora es oficial, ya “ye mundial”. Asturianos residentes en esquinas distintas del planeta, dentro y fuera de España, han adoptado sin dudar este lema para sumarse a la celebración de un día histórico para el acervo cultural de la región. Expresado con las palabras que utiliza en su felicitación el Centro Asturiano de Barcelona, “no hay nada como la sidra, un símbolo que va mucho más allá de ser una bebida, es una parte esencial de la cultura y la identidad de Asturias, una tradición que une a las personas y lleva el sabor de nuestra tierra a cada rincón del mundo”. En Madrid, en el centro que presume de ser la casa regional más antigua del mundo, su presidente, Valentín Martínez Otero, celebró la cultura sidrera y "esa sidra que nos recuerda el cabello rubio de la xana, que se sirve en vaso de fiesta y se escancia en pequeña catarata".