El turismo rural gana presencia y mercado y acomete un verano que se prevé histórico en reservas. Los establecimientos rurales de Asturias, aglutinados en la Asociación ARCA, que preside Jaime García, tienen claro que el camino de la sostenibilidad es el correcto, y que además va ligado a las propias características del territorio.

Así quedó de relieve en los encuentros celebrados con motivo de la Feria de la Ascensión, que tuvieron lugar en Oviedo bajo el epígrafe “Turismo Rural Sostenible y Digital”.

En la jornada se dio especial relevancia al origen del turismo rural en la región, que es también el origen del turismo rural en toda España, contando con la intervención de Violeta Álvarez de “Caserías de Sorribas” en Infiesto y Jesús Mier. gerente del “hotel La Rectoral de Taramundi”, cunas ambas de los inicios del turismo rural.

Ambos hicieron un recorrido a lo largo de los últimos 30 años de turismo rural en la región, durante el cual se ha reconocido especialmente la figura de Isabel Campuzano, a la que se rindió homenaje como principal impulsora, tanto del turismo rural de Asturias, como de la asociación de alojamientos rurales ARCA, haciendo entrega a su viudo de una placa conmemorativa.

Desde ARCA entienden que el turismo rural supone una fuente de ingresos para muchas zonas, y un revulsivo para la economía del entorno, logrando que otros sectores, como la ganadería o la artesanía, perduren. Un turismo bien ordenado y gestionado debe ser sostenible a corto y largo plazo, fortaleciendo al territorio y beneficiando también a otros sectores. ARCA agrupa a alojamientos del entorno rural que comparten los mismos retos y de manera conjunta buscan soluciones para ser cada vez más profesionales. En este camino, consiguen mejorar la calidad de sus servicios y ayudar al desarrollo económico de aldeas y pueblos.