Oviedo,

Juan A. ARDURA

El consejero de Economía, Jaime Rabanal, defendió ayer la legalidad de la inclusión del «cheque bebé» y de las ayudas para ordenadores en la prórroga presupuestaria de 2008, medidas cuestionadas por el grupo parlamentario de Izquierda Unida. El portavoz de la coalición, Jesús Iglesias, acusó al Consejero de «hacer magia» al incluir en el presupuesto prorrogado esas partidas, que no estaban previstas en el Presupuesto de 2007.

Iglesias cuestionó, además de la inclusión de esas ayudas en la prórroga presupuestaria, la rebaja de transferencias a los ayuntamientos para poner en marcha escuelas para menores de 3 años o la reducción de inversiones en colegios de Educación Primaria por importe de 4,5 millones. El portavoz de IU también censuró que la prórroga prevea un aumento de más de cuatro millones en la partida destinada al Ente Público de Comunicación del Principado (de 20 a más de 24 millones de euros). A juicio de Iglesias, «todo eso es ir más allá de la posibilidad de la prórroga presupuestaria. Eso es hacer magia».

El consejero de Economía defendió la corrección formal de la prórroga, figura a la que el Ejecutivo regional tuvo que recurrir después de que sus antiguos socios de IU y el PP tumbaran el proyecto de Presupuestos. Rabanal expuso los argumentos que dan carta de legalidad a la inclusión de las ayudas del «cheque bebé» y para la adquisición de ordenadores.

«Es una decisión perfectamente legal. El Gobierno, con recursos limitados por la prórroga, ajusta las partidas de gasto sin comprometer el funcionamiento ordinario de los servicios, siempre que haya ingresos (...) Podemos discrepar sobre la orientación del gasto, pero no se puede aceptar que sea ilegal. Tomo lo de la magia como un piropo», contestó el titular de Economía a IU.

Rabanal defendió la inclusión de anticipos de gasto para hacer frente a los gastos plurianuales. Ante esas explicaciones, Iglesias replicó que «al Gobierno regional no le haría falta aprobar ningún presupuesto más, ya que le valdría con limitarse a prorrogarlo año tras año, incorporando de rondón sus nuevas políticas».

La diputada del PP, Alejandra Cuétara, definió la prórroga como «los restos de un naufragio, tras un tórrido romance de cuatro años», en alusión al pacto de gobierno PSOE-IU de la anterior legislatura y dijo, sobre la prórroga, que «no es lo peor que ha hecho el señor Rabanal».