Oviedo, A. Á / Efe

Un informe elaborado por el Consejo Económico y Social sobre el estado del medio ambiente en Asturias en 2006 ha revelado que cada asturiano consumió un promedio de 180 litros de agua diarios, catorce más que la media nacional.

El informe fue presentado ayer en rueda de prensa por el presidente de la Comisión de Desarrollo Regional y Medio Ambiente y vocal del CES, Pedro García, quien estuvo acompañado por el presidente de este organismo, Nicolás Álvarez, y por la coordinadora y socióloga Begoña López.

Según se recoge en el documento, el incremento del consumo de agua en el ámbito doméstico contrasta con el descenso de cinco litros por habitante y día registrado en el resto de España y sitúa a Asturias tercera en el ranking de consumo de agua, por detrás de Andalucía y Cantabria.

El estudio revela además un incremento en la producción de residuos y un descenso en el consumo de energía en la región con respecto a 2005.

Los residuos urbanos generados en Asturias crecieron casi 10 puntos porcentuales, superando en cuatro el incremento registrado a escala nacional. Además, de los 1,1 millones de toneladas recogidas por Cogersa en 2006, el 63,4 por ciento fue enviado directamente al vertedero, y sólo el 36,6 se destinó a reciclaje, tratamiento y compostaje.

En lo que respecta a la energía, el estudió del CES constató un descenso del consumo de un 6,4 por ciento en 2006, que, acompañado de un incremento de la producción autóctona, se tradujo en una mejora del grado de autoabastecimiento energético de la región.

En este apartado, las emisiones de dióxido de carbono registradas en el Principado en 2006 experimentaron un descenso de un 11,4 por ciento respecto a los valores de 2005 y se situaron por debajo de los 25 millones de toneladas, mientras que en el conjunto de España aumentaron en el mismo periodo 3,6 puntos porcentuales.

La entrada en funcionamiento en 2006 del parque eólico de Belmonte y la instalación de captadores solares, módulos fotovoltaicos y biomasa térmica hizo que la aportación de las renovables aumentase hasta cubrir el 4,2 por ciento del consumo energético total, 2,6 puntos menos que en el resto de España.

El estudio valora además el incremento del gasto que las empresas asturianas destinaron en 2006 a protección ambiental, que ascendió a 129,3 millones de euros.