En rueda de prensa ofrecida hoy, el líder del PP, Ovidio Sánchez, ha recordado que su partido realizó varias iniciativas contra este recargo porque "en una sociedad con problemas de crecimiento como la asturiana no se puede penalizar a los ciudadanos".

"Si queremos salir de la crisis actual tenemos que suprimir los impuestos que graban el sector primario", ha añadido.

En su opinión, el Ejecutivo regional "no ha realizado un trabajo diligente" en los hospitales por lo que se hacen necesarias este tipo de medidas.

Preguntado por la situación de otras comunidades como Valencia y Madrid que están gobernadas por el PP y que también aplican el "céntimo sanitario", se ha limitado a decir que sus preocupaciones "se centran en Asturias".

La polémica surgió ayer después de que la Comisión Europea cuestionara la legalidad de este impuesto, aplicado por varias comunidades autónomas, entre ellas Asturias, por considerar que no respeta la normativa europea.

En este sentido, Areces anunció ayer que la comunidad seguirá utilizando el "céntimo sanitario" para financiar la sanidad pública, un tributo "que hoy por hoy es absolutamente legal", hasta que no se arbitren otras alternativas "que hoy por hoy no existen".

Este impuesto fue aplicado en Asturias a partir de 2004 y contemplaba incrementar en 2,4 céntimos de euro por litro el precio de las gasolinas y en 2 céntimos el del gasóleo.

El decreto de prórroga aprobado por el Gobierno asturiano para 2008 prevé una recaudación de 37 millones de euros en concepto de recargo sobre la venta minorista de determinados hidrocarburos, que se distribuye entre la administración autonómica y la central.