Oviedo,

Luján PALACIOS

La falta de recursos económicos obliga a muchas parejas a buscar soluciones ingeniosas cuando se rompe el amor. Cuando una relación se acaba, en muchos casos ya no se da por bueno el «tú por tu lado y yo por el mío». La realidad económica, con hipotecas por pagar y un mercado inmobiliario complicado en el que vender la vivienda se torna harto complicado, amarra a muchos bajo el mismo techo.

La realidad que constatan los abogados cada vez contabiliza más casos de parejas que, aún estando separados de hecho, comparten la vivienda, porque no pueden venderla o hacerse cargo de nuevas hipotecas.

Así, algunos matrimonios en crisis han llegado a recurrir a documentos privados que dejan claro la situación de ruptura entre ellos, pero que a la vez sirve para pactar una convivencia independiente y hacer frente a los compromisos económicos.