«Su trayectoria debe de servir de ejemplo para todos los asturianos por su empuje, su lucha y su capacidad como emprendedora», apuntaba Ovidio Sánchez, presidente del Partido Popular en Asturias. Mientras, Margarita Collado, que conoció a Gómez Haces cuando formaba parte de la secretaría general del IDEPA, dijo «luchó por el liderazgo de las mujeres en el mundo de la empresa, que por desgracia aún es muy escaso. Aportó mucho a su movimiento asociativo». «Poseía una fe cristiana sin fisuras», terciaba el periodista y escritor Esteban Greciet, amigo de la fallecida, que no podrá olvidar cómo Gómez Haces «estuvo llena de proyectos empresariales hasta el final». Sin duda, uno de los proyectos más especiales para Gómez Haces no era otro que la asociación que fundó a mediados de los noventa. «Es su mejor herencia», aseguraban quienes la conocían.

Y esta herencia la recogerán las mujeres que conforman la junta directiva de su proyecto más exitoso. «Sabía sacar lo mejor de nosotras», explicaba Choni Arnaldo, miembro de la junta directiva de la Asociación Empresa-Mujer (Asem). Su compañera Marta Bravo la recordará como una mujer «incansable». Tanto es así que el sábado «habló con nosotras para cambiar de fecha una reunión». Y es que, para Bravo, tratar de destacar una de las ocurrencias de Gómez Haces para explicar mejor su carácter es «prácticamente imposible, porque en sí misma era toda una anécdota».

María Luisa de Miguel, también miembro de la junta directiva de Asem, destaca cómo «siempre miraba por el dinero de la asociación para que no faltara de nada». Tanto es así que De Miguel aún no se ha olvidado de un viaje a Barcelona a una conferencia con cena de gala en el exclusivo palacio de Pedralbes. «Como el viaje corría a cargo de la asociación, en lugar de en taxi desde el hotel fuimos en autobús vestidas de gala, para sorpresa de todos», repasa, para añadir: «Era capaz de hacer grandes cosas con poco dinero». ¿Y como jefa? «Intentaba sacar lo mejor de todas nosotras poniéndote al límite, lo que te obligaba a espabilar. Pero sabía hasta dónde podíamos llegar», sentencia. Para María Antonia Álvarez, otra de sus pupilas, Gómez Haces «fue un motor para todas nosotras. Sabía encontrar un buen negocio donde parecía imposible».

Mientras, a escasos metros, el capellán del Hospital Monte Naranco y profesor en el Peñaubiña de Gómez Haces, Salvador Tejedor Molero, encabeza el rezo de un responso por la empresaria. Y durante todo el día las muestras de condolencia que fueron llegando al tanatorio ovetense fueron innumerables. El funeral por el eterno descanso de Kike Gómez Haces tendrá lugar hoy, a las cinco de la tarde, en la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Carmen (Padres Carmelitas).