Oviedo, David ORIHUELA

María del Carmen Marchante Barrobés, Karmele Marchante o «Pop Star Queen», el nombre con el que intentó acudir a Eurovisión. Son las tres personalidades de una de las periodistas más conocidas de España. Toda una paradoja, ya que la fama no conlleva que el público conozca una dilatada carrera que comenzó en publicaciones «underground» en la lucha antifranquista. Karmele Marchante participó ayer en el hotel Ramiro I de Oviedo en la presentación de «Expogay», una feria y que se celebrará en octubre en Torremolinos pero que antes se presentará en toda España. Oviedo fue la primera cita en esa ronda de bolos.

-¿María del Carmen, Karmele y «Pop Star» son tres personas distintas?

-Soy bastante poliédrica y polifacética. Cuando llegué a la Facultad de Periodismo de la Universidad de Navarra, adonde mis padres me mandaron para hacer de mí una mujer, había muchas Carmen y así pregunté cómo se decía en euskera, me dijeron que Karmele y desde entonces me ha quedado el nombre. «Pop Star Queen» nació y morirá con la canción del «Tsunami».

-Pero sigue siendo María del Carmen.

-Sí. María del Carmen sigue viviendo, claro.

-Usted fue directora de la revista «Star», icono de la contracultura antifranquista, y fue redactora de «Ajoblanco». ¿Se podría hacer ahora ese tipo de periodismo?

-No. Ahora estamos en una época de retroceso. En aquellos años, antes de la muerte de Franco, hacíamos periodismo alternativo, pero al mismo tiempo también lo hacíamos oficialista. Nos matábamos en revistas como «Star» o «Ajoblanco», pero al mismo tiempo yo hacía información oficial todas las mañanas.

-También estuvo en los servicios informativos de TVE y trabajó en «Informe semanal», entre otras cosas.

-Puedo decir que he pasado por todos los géneros del periodismo y por todos los medios audiovisuales. Tengo una trayectoria y lo que hago no es vergonzante.

-¿Cómo llegó a la prensa del corazón, por decisión o por evolución?

-Por casualidad, como todo en mi vida. Lo que ocurre es que en el periodismo al llegar a un escalón determinado estás encasillado para siempre y es lo que me ocurre a mí con la crónica social o prensa del corazón. Pero yo sigo con mis trabajos como feminista y el día 20 saldrá a la venta un libro mío que será un bombazo.

-¿Sigue siendo necesario el trabajo como feminista?

-Hay un retroceso en las libertades. En la sociedad, en la ciudadanía europea hay un retroceso por la adormidera social que impone la clase política en toda Europa.

-¿Se ve de icono gay?

-Me han elegido como pregonera del «Día del Orgullo» en Valencia y también estaré en Madrid; en todos los locales de ambiente pinchan mi canción así que ya me explicará.

-Su relación con Asturias viene de antaño.

-Sí. Hace muchos años, dentro de mi actividad feminista, conocí a un grupo de feministas asturianas y trabajamos juntas, así que vine mucho a Asturias y conozco toda la región porque pasé aquí muchos veranos. La última vez que estuve fue hace dos años que vine a ver a estas amigas.

-Se ha puesto la pegatina con el emblema de la candidatura de Oviedo a la capitalidad cultural europea en 2016.

-Sé que Oviedo se presenta a capital europea de la cultura y quiero mostrar mi apoyo más entusiasta.

-Usted es periodista en un mundo, en el de la prensa del corazón, donde los «famosos» se convierten en colaboradores de los programas.

-Estoy absolutamente en contra del intrusismo. No sólo en la prensa del corazón sino en toda la prensa, en televisión, en radio, en los medios escritos. Cualquiera puede hacer de periodista. Pero yo no me puedo meter al quirófano. No soporto el intrusismo.

«Tengo trayectoria, lo que hago no es vergonzante»

«Pasé muchos veranos en Asturias con mis amigas feministas»