Oviedo, P. G.

Si los grandes partidos, al menos a nivel nacional, tratan de recortar la influencia del peso del voto emigrante, el de la inmigración gana importancia con el paso del tiempo. Y es que el peso demográfico de los extranjeros en el país no ha dejado de aumentar incluso a pesar de la crisis. En Asturias el colectivo inmigrante es el único que crece año tras año. Y a pesar de ello la gráfica de la población asturiana sigue cayendo.

Así, y según los últimos datos provisionales ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE) a 1 de enero de este año, Asturias cuenta con 1.084.109 habitantes, 1.180 menos que un año antes. De ellos, 49.149, el 4,5 de la población total, son inmigrantes. Esto supone un incremento de 2.030 inmigrantes residentes en Asturias respecto a los que había el año pasado.

Buena parte de ellos, como ocurre en el resto del país, pertenece a alguno de los 27 países que forman parte de la Unión Europea (UE). Los extranjeros más numerosos en España, así como prácticamente en Asturias, son los rumanos, seguidos por los marroquíes y los ecuatorianos. En España, de los 46,9 millones de personas empadronadas, 5,7 son extranjeros. Así, todos los partidos llevan tiempo trabajando, o ya lo han hecho, en la inclusión en sus listas electorales de las comunidades extranjeras con más peso, para captar un voto que en muchos casos puede decidir unos comicios.