La búsqueda de Jacinto Bustelo, el vecino de Vega de Villar desaparecido hace una semana durante una riada que costó la vida a su mujer, Mercedes Díaz, se centra a partir de hoy en el lodo que hay en las márgenes del río Samarán.

Tras siete días de rastreos por tierra y aire, que permitieron descubrir varias prendas de vestir del desaparecido, el servicio de emergencias 112-Asturias ha informado en un comunicado de que hoy se ha decidido variar la línea de trabajo para buscar bajo el lodo, por si el cuerpo pudiese estar enterrado.

Según el Jefe de la Zona Noroccidental de Bomberos de Asturias, Ángel Castañón, esta misma mañana han empezado a utilizar una máquina semipesada para remover tierra y poder descartar que el cuerpo de Jacinto Bustelo se encuentre enterrado bajo el lodo que hay acumulado en las orillas del río.

Con la colaboración de familiares y vecinos del desaparecido, conocedores de la zona, y en coordinación con la Guardia Civil, se han delimitado tres puntos donde se cree que podría estar el cuerpo.

Estas zonas de trabajo han sido acordonadas para facilitar la labor y que la máquina pueda ir cribando todo el terreno.

La Consejera de Presidencia, María José Ramos, y el director general de Interior y Seguridad Pública, Valentín Ruiz, han vistiado hoy la base operativa del equipo de rastreo, establecida en unas naves agrícolas a la entrada de la localidad.

Desde que se alertase de su desaparición, los servicios de emergencias del Principado de Asturias articularon un dispositivo de rastreo y búsqueda en colaboración y coordinación con la Guardia Civil en el que han participado 40 efectivos de ambos cuerpos.

En el operativo de Bomberos de Asturias han participado efectivos de los parques de bomberos de Barres, Valdés, Tineo y La Morgal, además del Grupo de Rescate con un helicóptero, la Unidad Canina de la Entidad, y efectivos del Grupo de Buceo.

Además del trabajo en tierra, los helicópteros de Bomberos de Asturias han sobrevolado durante varias jornadas la zona, realizando rastreos aéreos hasta las playas de Arnao y Peñarronda, en Castropol, y en toda la ría del Eo. EFE