Oviedo, José A. ORDÓÑEZ

Javier Fernández se dio ayer, en La Corredoria, su primer gran baño de masas como candidato del PSOE. Arropado por Zapatero, por la plana mayor del socialismo asturiano y por el resto de candidatos locales del partido, a los que reclamó «ejemplaridad» y «transparencia», el secretario general de la FSA se mostró confiado en que la «unidad» y «seriedad» del socialismo se impondrán en las elecciones al «caciquismo» que aprecia en la derecha, en una clara referencia a Álvarez-Cascos. «Nunca haremos nada que no podamos explicar mirando a los ojos a nuestros vecinos», pidió directamente Fernández a los candidatos del partido.

«No queremos caudillos ni sátrapas, ni partidos con las siglas de los caciques que vuelven a la política, después de hacer negocios, envueltos en una bandera que es de todos», señaló el aspirante socialista a la Presidencia regional en alusión al ex ministro de Fomento, a quien acusó de «soberbio» y al que recordó que «Asturias no es una camisa a medida en la que se bordan las iniciales».

Además, en referencia a la candidata popular, Isabel Pérez-Espinosa, a la que siempre se refirió como «esa concejal», aseguró que «no puede ir dando lecciones de austeridad, cuando Oviedo es una de las ciudades más endeudadas, con mayor presión fiscal y con menos patrimonio de España». En este sentido, y para explicar «cuál es el concepto de austeridad que realmente tiene la derecha», Fernández acudió a ejemplos de administraciones del PP: «Valencia es la comunidad más endeudada, Madrid encabeza la lista de los municipios con mayor deuda, un secretario general de Esperanza Aguirre tiene un sueldo superior al del presidente de Asturias y la secretaria general, María Dolores de Cospedal, cobra tres veces más que el presidente del Gobierno».

El candidato socialista, que tuvo palabras de elogio para la gestión de Álvarez Areces, también se refirió a ese hipotético pacto, del que habla Álvarez-Cascos, por el cual PSOE y PP habrían llegado a un acuerdo para que los socialistas se hagan con el Gobierno regional y los populares con el Ayuntamiento de Oviedo. «Sólo con una mentalidad de cacique del siglo XIX se puede pensar que en la Asturias del siglo XXI se compran votos», reseñó Fernández.

Pese a reconocer que las elecciones que se avecinan resultarán «duras», el líder de la FSA aseguró que los socialistas tienen en sus manos la victoria en mayo. Es más, también se mostró convencido de que el PSOE está en condiciones de arrebatar la Alcaldía de Oviedo a De Lorenzo. A este respecto, Fernández explicó que cuenta con «amigos en el sector de la restauración, que tienen bares, sidrerías, casas de comidas o restaurantes de cierto postín», y que cuando les pregunta por qué un cliente va una y otra vez al mismo establecimiento siempre obtiene la misma respuesta: «Porque el prestigio se sostiene en la mayor calidad, la mayor atención y el precio más justo. Y esa receta, tan sencilla, es la que quiero transmitir para que la marca Asturias tenga prestigio por el amor al trabajo, al trabajo bien hecho, que eso debe ser el orgullo de ser asturianos y no lo que inventan otros demagogos», dijo en otra alusión a Cascos.