Para Javier Fernández, candidato socialista a la Presidencia del Principado, las Cuencas son «el lugar donde el corazón late a la izquierda». Además de la metáfora anatómica, el líder del PSOE asturiano utilizó ayer esa expresión en el teatro de El Entrego, en su penúltimo mitin antes de las elecciones del próximo domingo, para remarcar que en las orillas del Nalón y del Caudal la historia levantó «un muro político que las derechas no pueden derribar». Y a ese muro, a una geografía en la que está «la memoria» de la lucha obrera, apeló Fernández para pedir la «ayuda» y el voto de los asturianos el próximo 22 de mayo. «No pasarán», proclamó.

Ante una platea abarrotada y en mangas de camisa, sin el formalismo de la chaqueta -«aquí estoy más cerca de casa», dijo-, Fernández explicó que, a menos de 72 horas para los comicios, el PSOE estaba «ahí, peleándolo». «Éstas elecciones son muy difíciles», reconoció, «y la gente tiene que saber lo que se juega en las urnas». Por ejemplo, «los cien millones de euros que mantienen 15.000 plazas de educación al año en Asturias», y que la derecha «quiere entregar a los ricos al eliminar el impuesto sobre las herencias». Al penúltimo mitin de la campaña, el último antes de la fiesta de esta tarde en Gijón, Fernández llegó también con un recado personal del presidente del Gobierno, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero. «Diles a las comunidades mineras y a los sindicatos que vamos a trabajar para que las ayudas al carbón vayan más allá de 2018 (año límite marcado por la Unión Europea)», reprodujo el candidato.

Fernández, escoltado por el candidato socialista a la Alcaldía de San Martín, Enrique Fernández, y por el secretario general de la Agrupación Socialista del concejo, Benigno Enríquez, insistió en que las jornadas previas al 22-M son el «momento crucial de la campaña». Una fase previa al veredicto de las urnas que «no debe girar en torno a los candidatos, sino a nosotros», les dijo, «a lo que vosotros y yo, juntos, podemos hacer por el futuro de Asturias». Entre otras cosas, «que vuelva a ser la política la que gobierne la economía», en respuesta las peticiones de los manifestantes. A esa «juventud de izquierdas» también les pidió «que voten, para que no tengan que manifestarse el lunes contra las medidas que tomará la derecha».