Oviedo, M. J. I.

El cabo Luis Noval y Ferrao (Oviedo, 15 de noviembre de 1887), fallecido como un héroe durante un ataque enemigo en Melilla, el 28 de septiembre de 1909, recibió ayer el tradicional homenaje anual civil y militar de los asturianos en la calle de la capital que lleva su nombre.

Unidades del Regimiento de Infantería Príncipe 3, entre ellas la Compañía de Honores y la Marcha de Portadores, con el coronel y jefe del Regimiento, Francisco Rosaleny, al frente, protagonizaron el desfile en recuerdo al soldado ovetense, que murió en acto de servicio y que, tal como relatan las crónicas históricas de la época, «con su actuación logró la admiración de toda España».

La parada militar fue seguida por numerosos ovetenses y autoridades, entre las que se encontraban el delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín; el presidente de la Junta General del Principado, Fernando Goñi, y el senador Jaime Reinares, así como representantes del Gobierno de Asturias y otras instituciones y estamentos. El público expresó su simpatía por los soldados, clases de tropa y mandos del acuartelamiento de La Belga (Siero) que lleva el nombre del ilustre militar. A las once y media de la mañana el toque de corneta marcó el inicio del homenaje, que siguió con la revista a las tropas. El cabo Noval recibió la cruz de la Real Orden Militar de San Fernando por su «valor heroico en servicio y beneficio de España».