-La Universidad de Oviedo ha instalado un nuevo medidor en la caseta para la detección de contaminación en el aire situada junto al IES Astures de Lugones, gracias a un convenio de colaboración con la Consejería de Medio Ambiente.

-El sensor permite localizar partículas microscópicas carbonosas, producidas por la quema de combustible fósil, y es el primero de estas características que funciona en España.

-Así, se podrá detectar el origen de la contaminación y tomar medidas al respecto con el fin de evitar niveles excesivos de «black carbon», que pueden ser lesivos para la salud.

-La producción de estas partículas puede deberse a cuatro procesos: combustión de diésel, de carbón, de biomasa o funcionamiento de calefacciones.