Oviedo, L. S. NAVEROS

La total renovación que ha impulsado Mercedes Fernández en el PP asturiano ha cogido a los populares de Oviedo con su secretario general, Agustín Iglesias Caunedo, estrenando el cargo de alcalde, y con su presidente, Gabino de Lorenzo, en otra orilla, en la Delegación del Gobierno. La revolución en la lista del PP a la Junta General cuenta con el plácet de De Lorenzo, y, siguiendo con la larga tradición de acatamiento al jefe que ha distinguido durante más de veinte años a los populares ovetenses, nadie la discute oficialmente. Iglesias Caunedo, que tiene un papel destacado en el partido también a nivel regional, y que es presidente del comité electoral, rechazó ayer hacer valoración alguna, indicando, a través de un portavoz, que cualquier declaración debería salir del propio De Lorenzo. Ya con anterioridad había expresado su intención de mantenerse alejado de las aguas revueltas de la política regional. Sus colaboradores aseguran que no ha participado en la elaboración de la lista.

Destacados militantes y colaboradores del Alcalde, sin embargo, expresan en privado la pérdida de poder y representación que supone el cambio para el PP de Oviedo. Una cosa es una renovación, que todos consideran necesaria, y otra «una purga», afirman. La decidida apuesta del PP de Oviedo en la anterior cita electoral, la ex concejala Isabel Pérez-Espinosa, se queda fuera de la nueva convocatoria, y en representación de los populares de la capital llegará a la Junta General «Cuervas-Mons y poco más».