Oviedo, Pablo GALLEGO

El primero en mostrar los carteles que, desde la madrugada de ayer a hoy, inundan las calles del Principado fue el candidato del PSOE, Javier Fernández. En la sede central del partido en Oviedo, el secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA) afirmó que si había «un momento difícil» y unas «elecciones trascendentales, vitales para poder encauzar esta situación», eran éstos. Según Fernández, con el PSOE los asturianos tienen «un partido serio, sensato, cohesionado, y con experiencia para formar Gobierno». «Veo al partido con más fuerza, más ilusión y más ganas que nunca», aseveró Fernández. «Estoy dispuesto a darlo todo, sin otro horizonte, esperanza o expectativa que gobernar en Asturias», aseguró.

El candidato socialista, como tantas otras veces ha hecho, insistió en el hecho de que «nunca valora encuestas», aunque ayer el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicaba un sondeo que daba al PSOE catorce escaños, uno menos que en mayo de 2011. A pesar de ello, Fernández puso el foco en que «todas las encuestas nos dan ganadores en votos y en escaños». Si terminado el escrutinio la noche del 25-M eso ocurre, «seremos el partido encargado de formar Gobierno en Asturias», sentenció. Al cierre de esta edición, Fernández abría oficialmente la campaña en la Casa del Pueblo de Gijón.

A las seis de la tarde, el paseo de los Álamos, en el ovetense Campo San Francisco, se convirtió en el centro neurálgico de la campaña electoral asturiana. Allí, el candidato de Izquierda Unida, Jesús Iglesias, y el resto de los miembros de su lista electoral mostraron «la única valla publicitaria de esta campaña». El cartel, compuesto por catorce trozos y sostenido por militantes de la coalición, muestra el lema «¡Podemos con ellos! Rebélate», con el que IU aspira a mejorar los cuatro escaños obtenidos el pasado 22 de mayo.

Aunque la encuesta del CIS publicada ayer les da siete escaños, tres más, Iglesias quitó importancia a los sondeos, aunque lo favorezcan. Sí destacó que los datos «marcan tendencias», como una progresiva «fragmentación» de la derecha. Y que en la izquierda la formación que más posibilidades tiene de crecer es, precisamente, la suya. Según Iglesias, IU defenderá «la heterodoxia» frente «al discurso que pretende colocar un corsé a la sociedad».

Junto al teatro Campoamor, el candidato de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Ignacio Prendes, fue el único que revivió las míticas pegadas de carteles -con cola y escoba- de las décadas de los ochenta y los noventa. La formación que preside Rosa Díez será, según el CIS, la gran beneficiada de los comicios del 25 de marzo. Tras quedarse a las puertas de la Junta en mayo, ahora Prendes entraría en el Parlamento asturiano acompañado por su «número dos», Pedro Herrero, e incluso podrían ser la llave del nuevo Gobierno. Entre gritos de «¡diputado!, ¡diputado!» y en un acto sencillo, Prendes apuntó que los datos «demuestran que hacemos las cosas bien». Su mensaje a los asturianos fue claro: que voten «a favor de las ideas».

El montaje electoral de mayor envergadura fue, ayer, el del Partido Popular. Sobre un escenario azul y blanco -colocado también sobre el paseo de los Álamos- y al lado de un panel que, no sin problemas, giró hasta mostrar la imagen de su candidata, Mercedes Fernández, los populares se presentaron ante los asturianos con mucho más brío que el pasado 22-M. «Estamos comprometidos con Asturias y queremos liderar un Gobierno sólido, dialogante y cooperante», explicó Mercedes Fernández, arropada por el alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, y por el secretario general del PP asturiano y «número dos» de la lista, Fernando Goñi.

Junto al cartel que, además de su imagen -la misma que en las generales de noviembre, en las que el PP obtuvo el mayor número de votos-, muestra su firma, Cherines, la líder popular, defendió una candidatura «de equipo, de todos, sólido y con trayectoria», que ofrece «un compromiso de futuro con esta tierra nuestra». Sobre la encuesta, Cherines destacó que el PP subía, mientras que Foro y el PSOE descendían en número de escaños. «Vivimos un momento difícil», reconoció, «pero Asturias saldrá de ésta, porque entre todos podemos situar a esta región en el lugar que le corresponde», sentenció.

Foro Asturias fue el último partido en comenzar la carrera electoral hasta el 25-M, más cerca de la medianoche, hora oficial del inicio de la campaña. En Avilés, en un local abarrotado por miembros del Gobierno, afiliados y simpatizantes del partido, Francisco Álvarez-Cascos explicó que el antiguo Niemeyer era ahora el ejemplo «de lo que Foro propone como modelo de gestión de los recursos públicos y de transparencia». Tras iniciar en mayo de 2011 la campaña electoral en El Bao, Cascos afirmó que la elección de Avilés se debía al «simbolismo» que representa el centro diseñado por Oscar Niemeyer y por la proximidad de Arcelor-Mittal y de otras industrias básicas, cuyo futuro, como el de Asturias, considera que está en cuestión si no es su partido quien gobierna.