Oviedo, J. A. ARDURA

«El PSOE está dispuesto a asumir la responsabilidad de gobierno en Asturias». Un Javier Fernández sonriente apostó por «la iniciativa» que las elecciones autonómicas del 25-M conceden a su partido para buscar la gobernabilidad de Asturias como mensaje principal de una puesta en escena bien distinta de la de diez meses atrás. El llanto contenido de María Luisa Carcedo en mayo pasado, cuando los socialistas cosecharon el peor resultado de su historia, se mudó ayer en una satisfacción contenida porque los primeros comicios anticipados en el Principado no han resuelto en la noche electoral un mapa político complejo. El PSOE asturiano no descartaba al cierre de esta edición poder arrebatar un escaño a Foro en la circunscripción occidental tras el escrutinio del voto emigrante, aunque asumía que será «difícil». La solución, el próximo miércoles.

«Estamos ante un Parlamento complejo», manifestó el «cartel autonómico del PSOE, después de celebrar, con un directo «hemos ganado las elecciones en Asturias», la victoria en escaños y en las tres circunscripciones. «A partir de ahí haremos todo lo posible para que en un plazo corto se pueda conseguir la estabilidad parlamentaria en Asturias».

Javier Fernández aseguró que además de iniciar «cuanto antes» el diálogo con todas las fuerzas políticas que han obtenido representación en la Junta General del Principado, su partido tendrá entre sus prioridades cambiar la percepción que los asturianos tienen actualmente de su clase política. El líder de la FSA aseguró que la baja participación en las elecciones autonómicas del 25-M «no es una casualidad ni indiferencia». En su opinión, el alto nivel de abstención de los asturianos refleja «la desafección de lo que ha ocurrido en los últimos meses en Asturias». Y afirmó que «los socialistas estamos aquí para cambiar esa perspectiva y la opinión que los asturianos tienen de la política». La comparecencia pública de Javier Fernández se retrasó anoche hasta que el escrutinio del voto en urna en Asturias era prácticamente del cien por ciento. Si la cara es el espejo del alma, la del candidato socialista ayer era bien diferente a la de mayo pasado cuando se había mostrado menos receptivo. Ayer, tras estrechar un sentido abrazo con su hija Elena, hasta aceptó una improvisada «mini-rueda» de prensa, en la que confesó que la noche electoral del 25-M le dejaba una sensación «agradable». Y fue en ese momento cuando Javier Fernández, siempre muy comedido en sus declaraciones y poco dado a realizar manifestaciones de cara a la galería, dejó entrever que el recuento del voto emigrante puede arrojar novedades relevantes, en cuanto a la asignación de escaños. «El escrutinio aún es provisional», manifestó un Javier Fernández que evitó entrar en más valoraciones sobre el voto emigrante. Fernando Lastra, que acompañó al cabeza de lista durante toda la noche electoral, no descartó la posibilidad de recuperar un escaño a Foro en el Occidente aunque admitió que «es difícil, habrá que contar». El secretario de Organización y responsable de la campaña, Jesús Gutiérrez, destacaba la hegemonía de vencer en las tres circunscripciones y también albergaba esperanzas de llegar a 17 diputados. Y ese era el comentario anoche en el hotel elegido por el PSOE para centralizar sus comparecencias de la noche electoral, en el complejo Calatrava de Oviedo. Por allí andaban, entre otros muchos, los diputados de «nuevo cuño» como José María Pérez y Nino Torre, la ex consejera de Cultura, Mercedes Álvarez, el eurodiputado Antonio Masip y el ex presidente del Principado Vicente Álvarez Areces, que cruzó un saludo con Javier Fernández. «Los socialistas hemos iniciado el camino de la recuperación», valoraba el ex presidente, que hacía votos por la modificación del voto rogado.

En suma, los socialistas vivieron la noche electoral del 25-M con otro «aire», distinto del revés de diez meses atrás, pero con la impresión de que la «reconquista» que debía empezar por el Norte, anoche ya lo hizo en el Sur, pese a que la primera victoria de la «época Rubalcaba» ha sido en Asturias.