Oviedo

La abstención registrada en los comicios autonómicos de ayer se ha convertido en la más alta de toda la historia de la democracia en el Principado. En términos porcentuales, se quedaron en casa el 44,08 por ciento de los asturianos con derecho a voto. Esto supone que dieron la espalda a las urnas 396.777 votantes, frente a los 503.395 que acudieron a los colegios electorales y votaron correctamente. Es decir, la diferencia entre uno y otro bloque es tan sólo de 106.618 votantes. Además, hubo 4.283 votos nulos (0,85 por ciento) y 7.162 votos en blanco (1,43 por ciento).

El porcentaje de abstenciones llama aún más la atención si se tiene en cuenta que en las elecciones celebradas en mayo de 2011 fue del 33,11 por ciento. Es decir, en menos de un año el 10 por ciento de los electores optaron por no repetir su camino hacia las urnas para votar.

La segunda abstención más alta en unas elecciones a la Presidencia del Principado tuvo lugar en 1991. En aquel momento optaron por no ejercer su derecho al voto el 41,31 de los electores asturianos. Las elecciones de 1991 y las de ayer fueron las únicas en las que la abstención superó el 40 por ciento.

En cambio, las autonómicas con mayor número de participantes fueron las del año 1995, cuando la abstención no llegó al 31 por ciento.