Oviedo, Pablo GALLEGO

Ni derecha ni izquierda, al menos de momento. El diputado electo de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Ignacio Prendes, que con su voto decidirá el color del Gobierno de Asturias, no suelta prenda. Es más, en su estreno en la Junta General abogó por que los, de momento, únicos candidatos a la Presidencia del Principado -el socialista Javier Fernández y el líder de Foro, Francisco Álvarez-Cascos- sean capaces de lograr acuerdos que desemboquen en un Gobierno «de concentración», con la participación del mayor número de fuerzas políticas posible. Su objetivo, lograr la «estabilidad política» regional y «acometer las reformas profundas que Asturias necesita». Aún es demasiado pronto, explicó Prendes, para decantarse por uno de los dos candidatos. «Cuando esa puerta se cierre, hablaremos de otras opciones», añadió. Y por el camino reclamó su derecho a abstenerse en la votación, como cualquier otro diputado. «No voy a admitir que se cargue sobre mí la responsabilidad de que Asturias tenga o no Gobierno», sentenció, «soy un único diputado frente a otros 44».

El día en que Javier Fernández y Francisco Álvarez-Cascos hablaron por primera vez con quien decidirá -a falta aún de un acuerdo entre Foro y el PP, para empatar con los 22 escaños de la izquierda- quién de los dos será el próximo presidente del Principado empezó por la puerta grande. A las diez de la mañana de ayer Prendes pisaba por primera vez en la Junta, y lo hacía por la entrada y la escalera principales, reservadas generalmente al presidente del Parlamento. Ya en el primer piso, y tras un breve saludo al jefe del Parlamento, Fernando Goñi, Prendes se encerró con el aspirante del PSOE, Javier Fernández.

Una hora y media más tarde -la reunión más larga hasta el momento-, el líder de los socialistas asturianos enviaba el primer mensaje para aclarar que la alianza con UPyD -y por tanto llegar a la Presidencia del Gobierno- era posible. «En los términos generales en los que hemos hablado sí hay afinidades, y en otros habrá que encontrarlas. No hay cuestiones en las que tengamos una confrontación abierta», aseveró Fernández. Ante la negativa del diputado de UPyD a entrar en el Gobierno, el secretario general de los socialistas asturianos explicó que las opciones posibles eran lograr un pacto sólo para la investidura, o llevarlo más allá y firmar un acuerdo de legislatura. Ante lo decisivo del voto de Prendes -no sólo para la investidura, sino para asuntos como el proyecto de Presupuestos, donde los diputados de la izquierda y la derecha, veintidós a cada lado, podrían volver a estar empatados- Javier Fernández mostró su preferencia por llegar a un pacto que dé «la mayor estabilidad parlamentaria posible».

De los cinco encuentros de ayer en la Junta, el de Prendes y Fernández fue el primero, y la cita con Álvarez-Cascos, la última. La conversación, que se inició pasadas las seis y media de la tarde, fue más corta -poco más de una hora-, y en ella el diputado de UPyD propuso al ya presidente del Gobierno en funciones el mismo reto que al candidato socialista: que haga el esfuerzo por lograr un Gobierno con «la mayor base posible». «Sería un signo que, desde Asturias, lanzaríamos al conjunto del país», explicó.

Por separado, tanto Javier Fernández como Francisco Álvarez-Cascos han rechazado ya la idea de Prendes. Dicen que sus diferencias programáticas, sus modos de abordar los problemas de Asturias, son demasiado distintos, aunque el diputado de UPyD no se da por vencido. E igual que hiciera el candidato socialista, el líder de Foro restaba importancia a sus diferencias con UPyD y afirmaba ver un margen de coincidencia «amplio» entre su programa electoral y el de Prendes. Tantas que le enviará un listado de las principales propuestas de Foro, para que las estudie, además de proponerle que UPyD tenga un puesto en la Mesa de la Junta. «Hay coincidencias, pero también importantes desencuentros», matizó Prendes.

Prendes, que mañana se reúne con la presidenta del PP, Mercedes Fernández, insistió en que, aunque la abstención es una opción, lo que UPyD busca es dar a Asturias un Gobierno fuerte. «Me mojaré cuando tenga que mojarme», sentenció.

Oviedo, P. G.

La negociación que ayer se inició en la Junta General entre Foro Asturias y UPyD será determinante para el nuevo Gobierno del Principado, pero no es la primera en la que ambos partidos se ven envueltos. A mediados de diciembre del año pasado ambos partidos acordaban que el único diputado de Foro en el Congreso de los Diputados, Enrique Álvarez Sostres, apoyaría a la presidenta de UPyD, Rosa Díez, para que su partido tuviese un grupo parlamentario y voz propios en la Cámara baja, evitando el concurrido Grupo Mixto. Tras la lluvia de críticas de sus simpatizantes en las redes sociales, el «número dos» de UPyD, Carlos Martínez Gorriarán, llegó a reconocer que el pacto con Foro era «un sapo que hemos tenido que tragar para hacer mejor nuestro trabajo». Ignacio Prendes añadió que el acuerdo se limitaba al Congreso, y que UPyD y Foro eran «dos partidos muy distintos, y así seguirán siendo».