Oviedo, M. P.

El recorrido barre la geografía asturiana del queso y va del límite con Galicia a la frontera con Cantabria, de las orillas del Cantábrico a las Ubiñas y de las cuencas mineras a los Picos de Europa. LA NUEVA ESPAÑA entrega desde mañana a sus lectores el coleccionable «Asturias, el país de los cuarenta quesos y sus recetas», una ruta guiada por lo mejor de la artesanía quesera del Principado desmenuzando las características de cada variedad e imaginando platos hechos con ellas. La obra, de afán divulgativo, se compone de cuarenta fichas, una por semana y una por clase de queso, que ofrecen en el anverso una descripción esencial de cada tipo de producto y proponen en el reverso una receta que la combina con otros ingredientes, mayoritariamente autóctonos. La entrega de mañana ofrece sin coste, junto al periódico del día, la primera ficha, dedicada al «afuega'l pitu», y la carpeta contenedora.

El cocinero Lluis Nel Estrada se responsabiliza de la selección y de la confección de las recetas con el propósito de «invitar a cocinar con quesos, de fomentar su consumo» a través de recetas sencillas, y de difundir a la vez el alcance del patrimonio que hace de Asturias la «mayor mancha quesera de Europa». Se trata, añade, de «concienciar al consumidor de que además de un alimento de una calidad muy elevada, el queso es también un ingrediente para cocinar de mucha entidad». A lo largo de ese camino, Estrada guía al lector a través de la diversidad de cuarenta variedades elegidas para representar la heterogeneidad de los quesos en Asturias, porque en el repertorio seleccionado los hay frescos, suaves e intensos, variedades con denominación de origen y modalidades artesanales ajenas a los canales de comercialización, y todo un muestrario completo que da para concebir propuestas gastronómicas diversas combinando el queso con jabalí, lubina o salmón, con pitu de caleya, oricios, jabalí u hojaldre, y construir así entrantes, segundos platos y postres.