El exconsejero de Sanidad del Gobierno asturiano entre 2003 y 2007 Rafael Sariego ha asegurado hoy ante la comisión de investigación del caso Marea que el titular de un departamento del Gobierno "no puede estar en el detalle" de todos los contratos que se suscriben en su ámbito de responsabilidad.

Sariego, que ha abierto la ronda de comparecencias en la sesión celebrada hoy por la comisión, ha negado conocer, a preguntas de los diputados ninguna irregularidad en las contrataciones realizadas por su consejería que, ha asegurado, delegaba en los funcionarios de su departamento y en la Secretaría General Técnica.

"Los funcionarios son gente muy competente que trabajan bien esos temas de contratación y llegan ya trillados" a la mesa del consejero ha apuntado el exresponsable de la sanidad asturiana, que ha asegurado además no tener conocimiento de que se produjeran reuniones con empresas proveedoras ni que éstas realizaran regalos a empleados públicos de su departamento.

El exconsejero únicamente ha admitido saber que en Navidad se recibían determinados regalos en la Consejería, entre ellos "un lote navideño" enviado por la Junta General, y ha considerado "probable" que algunas empresas hicieran lo propio en esas fechas.

Sariego, que ha negado conocer a los responsables de Igrafo y Almacenes Pumarína ni las contrataciones realizadas con la sociedad La Productora, ha asegurado no ser un experto en derecho administrativo al ser preguntado sobre la posibilidad de que se cumplieran o no todos los requisitos de contratación.

"Un consejero no puede estar en el detalle de todos los contratos, no los conoce en profundidad como los funcionarios y dejaría de hacer otras cosas", ha añadido tras reiterar su confianza en el personal de su departamento por su profesionalidad y "bonhomía".

Tras la comparecencia de Sariego, que se ha prolongado apenas veinte minutos, su sucesor en el cargo, Ramón Quirós, ha comenzado a declarar ante la comisión parlamentaria de investigación.