El Principado asumirá el copago decretado por el Gobierno central para los beneficiarios de la Ley de Dependencia que reciben ayuda a domicilio en los casos de las rentas más bajas, que deberían abonar un mínimo de 20 euros al mes, lo que supondrá para la administración regional un gasto de 143.000 euros.

Este anuncio lo ha realizado hoy la consejera de Bienestar Social, Esther Díaz, durante su respuesta a una interpelación planteada ante el pleno de la Junta General del Principado por el diputado de UPyD, Ignacio Prendes.

Díaz ha recordado que, de los 2.386 dependientes que reciben ayuda a domicilio en Asturias, un 25 por ciento -596- tienen ingresos iguales o inferiores al Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), cifrado en 532,51 euros.

Para este colectivo Asturias establecerá "un copago cero" lo que supone apartarse del "criterio mínimo común" marcado por el Gobierno central dado que, según la consejera, el pago de los 20 euros para estas personas es "abusivo" y tiene "un efecto disuasorio" para los potenciales beneficiarios en dicha situación.

Además, el desarrollo de la nueva normativa aprobada por el Estado el pasado verano que incorporaba el copago en la aplicación de la Ley de Dependencia buscará beneficiar a los grandes discapacitados que perciben otros complementos económicos por cuestiones como tener un hijo de más de 18 años a cargo o recibir asistencia en un centro de día.

Así, mientras la normativa estatal prevé que estos complementos computen íntegramente como renta para definir el copago que habrían de afrontar o la reducción del importe de la ayuda económica que perciben por su condición de grandes dependientes, en Asturias sólo se imputará el 20 por ciento de dichas cantidades complementarias. EFE