Este quiebro de la sala se produce en torno a un patio que la ilumina, dotando a la sala de desahogo visual, así como de la privacidad necesaria para este tipo de uso.

La segunda sala tiene una forma rectangular, que al fondo se divide en dos partes: un patio y la zona de contemplación del fallecido. Esta última, dividida en el túmulo y un pequeño espacio delante del mismo para la contemplación por parte de los allegados. En este caso, para evitar una visión directa del fallecido se ha optado por situar la puerta de la sala en la esquina contraria al túmulo, teniendo así una visión directa al patio al entrar en la sala.

Los patios funcionan de forma exclusiva para cada sala, y la intención de los mismos es no sólo iluminar de forma natural, sino también introducir por medio de los mismos aire fresco en el interior, creando un ambiente natural y tranquilo, que contribuya a relajar y sosegar a los usuarios de las salas.

Las dos salas cuentan, además, con una puerta de acceso a la zona de trabajo-garaje, situada en el lateral contrario al patio del pequeño espacio delante del túmulo, que sólo se podrá abrir por parte del empleado del velatorio desde la zona de trabajo.

Esto permite que aquellas personas que quieran acceder al túmulo no tengan que rodear el edificio y solamente tengan que pasar momentáneamente por esa zona de trabajo, ya que la puerta del túmulo se encuentra junto a la de acceso a la sala.

La zona de trabajo-garaje consta de espacio suficiente para aparcar el coche fúnebre y para el desembarco del féretro, garantizando la privacidad de este espacio. Desde esta zona hay un acceso directo a los túmulos por medio de puertas de al menos un metro de ancho. Los túmulos serán locales refrigerados de acceso restringido en los que se ha instalado un gran ventanal fijo que se abre a la sala.

Esta zona, de uso exclusivo para los trabajadores, se piensa de un modo muy funcional, para hacer el trabajo de los empleados lo más eficiente y cómodo posible. De este modo se ha dejado un espacio diáfano para que ellos mismos puedan organizarse.

Otro aspecto que se ha tenido en cuenta a la hora del diseño del edificio es la sostenibilidad. Se propone un volumen compacto que ahorra en superficie de fachada. A su vez, se propone el uso de patios, que introducen iluminación natural, originan una ventilación natural cruzada dentro del proyecto y mejoran la calidad del aire en el interior.

Pese a que aparentemente se concibe como un edificio cerrado al exterior, se ha buscado que la sensación desde el interior sea la contraria, que en todo momento se iluminen las estancias principales de luz natural, esa luz que tanto ayuda a calmar a las personas que usarán el edificio para velar a sus seres queridos.

En cuanto a los materiales del edificio, se ha optado por combinar la tonalidad del suelo (tarima de madera envejecida) y del techo (hormigón visto) en una gama de grises y las paredes en blanco, de este modo se consigue controlar la luz y generar un ambiente de serenidad. En cuanto a los materiales de los patios, se ha decidido dejar una fina capa de piedra volcánica de tonos marrones que da más calidez al ambiente interior.