"La izquierda está muy viva, comienza la reconquista". Con estas palabras y una amplia sonrisa valoró ayer el líder regional de Izquierda Unida y candidato a la Presidencia, Gaspar Llamazares, la "resistencia" de su partido en Asturias. Ni Podemos ni Ciudadanos lograron desbancarle como cuarta fuerza política en el Principado con cinco diputados. "Son unos buenos resultados autonómicos y municipales; estamos satisfechos", declaró Llamazares, quien tendió la mano "al diálogo, la negociación y a un acuerdo de izquierdas" para gobernar el Principado. "Los asturianos no quieren resignación, declive y precariedad. Quieren una nueva etapa política", en la que según Llamazares, IU será clave, pues sin esta coalición "no será posible recomponer la izquierda en España".

El candidato a la Presidencia de Asturias -durante casi 16 años fue diputado en el Congreso- hizo estas declaraciones en el hotel Monumental Naranco de Oviedo, donde siguió la jornada electoral junto a su equipo. El coordinador regional de IU, Manuel González Orviz fue el primero en tomar la palabra: "A pesar de que lo intentaron, no lograron hacernos invisibles. El corazón de la izquierda real sigue latiendo".

Orviz hizo hincapié en la conservación del grupo parlamentario -los cinco escaños fueron obtenidos en las circunscripción central- y en el crecimiento experimentado en el ámbito municipal. De hecho, la coalición pasó de 118 concejales, obtenidos en 2011, a tener ahora 129. Mieres, Grado, Illas, Castrillón, Lena, Riosa son los seis concejos en los que IU ganó las elecciones. En los tres primeros además por mayoría absoluta. Todo ello demuestra que "IU ha logrado derrotar a las encuestas", según Orviz. En este sentido, el coordinador general alabó a la militancia, que a base de "esfuerzo y trabajo consiguió suplir la falta de recursos" durante la campaña. Una campaña que no sólo se desarrolló en estos últimos quince días, sino también en "los últimos cuatro años y en los cuatro siguientes". Orviz concluyó su intervención con una amplia sonrisa, diciendo que su partido iba a apostar por "el apoyo social y la regeneración política de Asturias". "Aquí no hablamos de aritméticas", remató.

Tras ello, fue el turno para Gaspar Llamazares, quien aseguró que, conocidos los resultados, "la derecha ha sido derrotada tanto en España y en Asturias. No le queda prácticamente un municipio urbano". Pero además, añadió, "el bipartidismo retrocedió en todo el país". Para el líder de IU, ambas noticias son "buenas", pues significa que "los ciudadanos piden un giro político".

"La izquierda está muy viva y nosotros vamos a participar en este cambio que pide España y también nuestra comunidad". Tanto, que según afirma Gaspar Llamazares, "Sin Izquierda Unida no hay recomposición posible de la izquierda española, por lo tanto ahí estaremos".

Llamazares opina que en estas elecciones los asturianos "no se han resignado", sino que han apostado por "la esperanza y han votado un cambio de rumbo de la política asturiana". Un cambio de rumbo que ahora está en manos de los políticos completar.

Para ello, Gaspar Llamazares tendió la mano al Partido Socialista y Podemos para hacer posible un gobierno de izquierdas. En este sentido, declaró, "esperemos que el resto de fuerzas hagan lo mismo y que estén a la altura de los ciudadanos". "Los asturianos no quieren declive y precariedad, quieren abrir una nueva etapa política en la región y también España", manifestó. A lo que añadió para rematar su intervención: "Aquí empieza la reconquista". Llamazares terminó abrazando a Orviz y al resto de diputados de su partido.