Javier Fernández compareció ante la prensa pasadas las once y media de la noche. Fue recibido con aplausos y gritos de "presidente, presidente". En la sala habilitada por la FSA en un hotel de Oviedo se respiraba cierto alivio, pero no euforia, hasta el punto de que Javier Fernández acabó su comparecencia pública de la noche electoral recordándole a los suyos: "¡Que hemos ganado, eh!".

Su intervención para valorar los resultados de las urnas fue breve. "Hay poco y mucho que decir. Hemos ganado las elecciones en los ayuntamientos, y también en el Principado", comenzó. Y tras agradecer el apoyo de los asturianos que han vuelto a dar su confianza al PSOE (que gana con 14 diputados, tres menos que en la pasada legislatura), aseguró que "haremos un Gobierno para todos los asturianos, para los que nos han votado y para los que no lo han hecho". Tras este breve anuncio de intenciones, Fernández contestó a las preguntas de los periodistas, que inevitablemente indagaron sobre las posibles alianzas que se abren en una Junta General muy fragmentada, con seis grupos parlamentarios. Fernández no quiso mostrar sus cartas ni hablar de las inclinaciones de su partido, hacia la fuerza mayoritaria de la izquierda, Podemos, o hacia la segunda fuerza más votada, el PP. "Primero tengo que valorar los resultados y escuchar a mi partido, ahora no estoy en condiciones de adelantar nada". Y sobre sus inclinaciones, insistió: "Mi preferencia es el PSOE, con ellos tengo que debatir. Hablaremos con todos los partidos, es mi obligación, y a partir de esas reuniones veremos las fórmulas para buscar un gobierno estable".

El líder socialista pasó de puntillas sobre el mayor sinsabor del PSOE en la noche electoral, la mayoría obtenida por Foro en Gijón, uno de sus feudos tradicionales. "Foro se ha mantenido en Gijón y se ha hundido en Asturias. El PSOE ha sido la fuerza más votada en la mayoría de los concejos. Ahora, habrá que buscar las fórmulas de gobierno", dijo.

El secretario de Organización de la FSA, Jesús Gutiérrez, destacó que se abre una etapa política "muy compleja", aunque destacó la fuerza de los socialistas en los municipios, "una base esencial para un partido". Gutiérrez sí valoró con mayor profundidad el resultado en Gijón: "Es un municipio donde gobernaba Foro, y eso hace muy difícil desbancarlo como primera fuerza", señaló.

Los simpatizantes fueron llegando al hotel donde la FSA celebraba la noche electoral con cuentagotas. Los candidatos regionales siguieron el escrutinio en una sala cerrada, mientras que Javier Fernández pasó la tarde-noche electoral en una habitación aparte, acompañado por su secretario de Organización. El primero en llegar a la zona para invitados fue el expresidente regional y senador Vicente Álvarez Areces, acompañado de su esposa, Soledad Saavedra. Para Areces, las elecciones muestran que "se ha abierto un nuevo ciclo político", en el que será necesario dialogar "para el bien de los ciudadanos". El secretario general de UGT, Justo Rodríguez Braga, considera que los ciudadanos han votado a la izquierda "y han castigado la reforma laboral". Entre los asistentes a la celebración estuvieron los diputados Antonio Trevín y María Luisa Carcedo, además de miembros del gobierno en funciones, como Faustino Blanco.