La marca de calidad para las sidrerías "espalma" a gusto de todos. Llagareros y hosteleros respaldan los requisitos del reglamento que ha diseñado el Principado para la obtención de este nuevo sello turístico, cuyos ejes fundamentales fueron desvelados ayer por LA NUEVA ESPAÑA: escanciado manual, sidra acogida a denominación de origen y cocina basada en productos autóctonos. "Damos un paso hacia la excelencia de unos establecimientos muy singulares", valora José Luis Álvarez Almeida, presidente de Hostelería de Asturias. "Usar la palabra Asturias con contenido es la forma adecuada de beneficiar al sector primario, raíz de nuestra riqueza gastronómica, y, en este sentido, entiendo que la cuestión se plantea bien", subraya Reyes Ceñal, gerente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Sidra de Asturias.
En concreto, el reglamento para optar al sello de calidad de las sidrerías incluye la obligatoriedad de que los establecimientos dispongan de personal para el escanciado manual, aunque permite que, de forma complementaria, también haya artilugios mecánicos para echar la sidra en las mesas. Además, se exige una carta de sidras en la que, al menos, haya dos marcas acogidas a la denominación. Una de ellas tendrá que ser de la variedad natural de escanciar, y la otra o bien de la filtrada (de mesa) o de la espumosa. En cuanto a la cocina, el reglamento exige que más de la mitad de la materia prima sea autóctona y que los nombres de los platos hagan referencia a la tradición sidrera asturiana.
El capítulo dedicado a las marcas ha caído bien en el sector llagarero, que venía defendiendo la obligatoriedad de que estas sidrerías con sello de calidad ofrezcan productos con denominación, aunque no de una forma exclusiva. "Es una gran noticia que detrás de esta distinción estarán siempre las sidras con denominación de origen, que son las que llevan el nombre Sidra de Asturias", apunta Reyes Ceñal, quien anuncia que desde el Consejo Regulador de la DOP se plantean, en un futuro, "vincular los establecimientos con la marca de garantía a nuestra página web", ya que, según indica, "hay muchas personas que quieren saber dónde encontrar durante todo el año nuestra sidra".
Ceñal también destaca que el reglamento de la marca tenga en cuenta a las sidras espumosas y filtradas, junto a la tradicional de escanciar. A su juicio, supone "un claro empuje a los productos más innovadores de los últimos años y que, además, tienen una gran calidad". La gerente del consejo destaca también que "ahora mismo, es raro que una sidrería no cuente con alguna espumosa acogida a la DOP". "Muchísimos establecimientos la tienen, ya que es un producto de gran calidad y con extraordinarias formas de maridaje", añade.
Para Ceñal, "la cuestión más delicada será la correcta certificación para que las sidrerías con esa distinción cumplan el reglamento", así como hacer "un seguimiento del mismo".
Desde la hostelería, José Luis Álvarez Almeida asegura que el manual de calidad de la nueva marca, en cuya elaboración tomó parte el sector, es "muy equilibrado" y permite que los clientes que acudan a estos establecimientos "tengan la garantía de que se van a encontrar en una auténtica sidrería asturiana y con los mejores productos". A este respecto, destaca el hecho de que la sidra con denominación vaya a estar siempre presente, "pero sin excluir otros tipos que puedan ser demandados por el público". Para el presidente de Hostelería de Asturias, el nuevo sello de garantía "viene a cubrir un hueco", tras la creación de otras marcas turísticas como Casonas Asturianas o Mesas de Asturias, y confía en que "será un éxito". Sostiene Almeida que distinguir a las sidrerías que quieran ir un paso más allá en la calidad del servicio se había convertido en "necesario".
La Consejería de Economía, que ha liderado la puesta en marcha de este nuevo sello turístico, ya tiene listo el reglamento y toda la documentación necesaria para su entrada en servicio. Una vez que reciba el visto bueno de la oficina de patentes, el reglamento aparecerá en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA). Las solicitudes podrán empezar a tramitarse en cuanto sea aprobado. Los establecimientos de "Sidrerías de Asturias" pegarán en sus fachadas un logotipo distintivo que ha sido diseñado por el gijonés Paco Currás.
