El pasado día 4 el BOPA publicó una resolución conjunta de las consejerías de Sanidad y Educación (ahora las ocurrencias de última hora para recordar a sus promotores se producen al alimón) por la que a los docentes se nos considera multicualificados, somos multitransversales y aparece lo que ni nos imaginábamos, ahora entendemos de medicinas. Yo me pregunto, con tanto programa, jornada, contenido interdisciplinar, etcétera, etcétera, ¿nos quedará tiempo para hablar de los instrumentos básicos de lectoescritura y cálculo?

La resolución se las trae, farragosa y llena de palabrería, apelando a la igualdad de mujeres y hombres y la erradicación de la violencia de género, la educación afectivo sexual y reproductiva, pasando por el respeto a las distintas orientaciones sexuales e identidades de género, la prevención del consumo de drogas y educación afectivo-sexual, todo ello como bases para la introducción en el currículo educativo. Tanto para endosarnos unas funciones que pueden acarrear consecuencias no deseables. Aquí olvidamos lo de zapatero, a tus zapatos.

La medicación no es un tema baladí. Si se cree que con la constitución de la Comisión de Salud Escolar, integrada por grandes conocedores del tema como los familiares y los docentes, el tema está garantizado hasta el punto de que tomará las decisiones que deban adoptarse respecto al reparto de tareas y de actuaciones, mal vamos.

Por otra parte, desde mi punto de vista, me parece de una ingenuidad supina pensar que, con la solicitud de colaboración por parte de los padres, se garantiza la exención de toda responsabilidad derivada de dichas actuaciones.

Sólo me queda hacer un par de añadidos: el primero (si es posible, que nadie se entere) es que el día que llegue a nuestros superiores la noticia de que hay docentes a los que no se les da nada mal la cocina, que se vayan despidiendo los/as cocineros/as de las distintas empresas porque nos lo cargan a nosotros.

Segunda y última, para los sanitarios: cuando las barbas de tu vecino..., os veo compaginando el fonendo y la jeringuilla con el taja y la plastilina.