Con una votación tan llena de suspense como una partida de póquer ayer se constituyó el nuevo Parlamento regional, que ya da pistas sobre los juegos de alianzas que pueden esperarse, al menos en principio, en la nueva legislatura. El presidente de la Junta será el socialista Pedro Sanjurjo, que repite en el cargo. Sanjurjo revalidó su puesto en competición con la candidata presentada por el PP, Emma Ramos. Y ya en esta votación quedaron claros los apoyos: Sanjurjo obtuvo 22 votos, de los 14 diputados de su partido, más los cinco de IU y los tres de Ciudadanos. Los nueve representantes de Podemos se abstuvieron en esta votación, y el PP cosechó para su aspirante los tres votos de Foro Asturias. Se perfilan así, dos ejes de alianzas: los socialistas con IU y Ciudadanos, y los conservadores del PP, con Foro. Podemos queda, en principio, algo aislado, en este primer fotograma del equilibrio interno de la Cámara.
La pugna del PP por la presidencia, anunciada la tarde anterior, había desequilibrado el juego de pactos previsto por los grupos parlamentarios (y orquestado, sobre todo, por el veterano socialista Fernando Lastra) para hacer un reparto "plural" del gobierno de la Junta. Y en castigo a esta insubordinación, en la siguiente votación, en la que se disputaban las dos vicepresidencias entre tres candidatos (de PP, IU y Podemos), el PSOE respaldó, con el apoyo de Ciudadanos, a la de IU, María José Miranda, que quedó la primera, con 22 apoyos. El candidato del PP, José Agustín Cuervas-Mons, terminó segundo en número de votos, con los apoyos de su partido, y obtuvo la segunda vicepresidencia. La aspirante de Podemos, Rosa Espiña, se quedó así sin el puesto que en principio le hubiera correspondido a su formación por el número de escaños.
A esas alturas de las votaciones, con el PP por detrás de IU en el orden de preeminencia en la Mesa de la Junta, y con la alianza más que evidente entre Ciudadanos, PSOE e IU, se hizo patente que los naranjas iban a ocupar la primera secretaría de la mesa, y que la segunda secretaría, último de los puestos en disputa, iba a estar entre Podemos y Foro Asturias. Uno de los dos partidos se iba a quedar fuera de la mesa del parlamento, y entre los periodistas se dispararon las quinielas sobre cuál de los dos sería castigado por el grupo mayoritario, el socialista, ya que con ambos las relaciones del PSOE son pésimas.
Como era de esperar, en la primera votación de estas dos secretarías, Ignacio Prendes, de C,s, se hizo con el primer puesto, con 17 votos (de PSOE y de su propio partido), mientras que las otras dos aspirantes, de Podemos y de Foro, quedaron con 14 votos cada una, la primera con el respaldo de los del PP, y la segunda, de los suyos y los de IU. Fue necesario celebrar una nueva votación para desempatar (una especie de nueva mano en el complicado juego de cartas que se jugaba en la Junta). Finalmente, y tras un tenso y laborioso recuento de votos (las votaciones son nominales y en urna, lo que las hace tediosas), Podemos entró "in extremis", con 17 votos, en el último puesto de la Mesa y fue Foro la fuerza que quedó relegada en el gobierno de la Cámara autonómica. Los designados ocuparon sus puestos: Pedro Sanjurjo (PSOE), presidente; María José Miranda (IU), vicepresidenta primera; José Agustín Cuervas-Mons (PP), vicepresidente segundo; Ignacio Prendes (Ciudadanos), secretario primero, y Rosa Espiña (Podemos), secretaria segunda. Foro se queda a la espera de que le ofrezcan un puesto sin voto.
Todo el mundo dió por sentando que había sido Ciudadanos el grupo que con sus tres votos había desempatado la última votación, salvando a Podemos, pero acabado el Pleno el propio Nicanor García confirmó que su grupo se había abstenido. Y se hizo evidente que fueron tres votos del PSOE los que impidieron que los de Pablo Iglesias quedaran descolgados.
El PSOE se felicita de la "pluralidad" y el PP lamenta: "No es un buen comienzo"
Constituida la Mesa, Pedro Sanjurjo abrió la X legislatura con un discurso en el que destacó la "tradición de debate, negociación y acuerdos" de la Cámara asturiana, que contará con seis grupos parlamentarios, y abogó por desarrollar un trabajo cercano y "útil" a los ciudadanos, con rigor y respeto.
Levantada la sesión, fue el momento de las valoraciones políticas. Javier Fernández, presidente en funciones, se felicitó por la"pluralidad" obtenida en la Mesa del parlamento, y lamentó que no fuera posible llegar a ese objetivo a través de acuerdos, por la decisión del PP de disputar la presidencia de la Junta. "Fue una nota de distorsión, alteró el desarrollo de las negociaciones", afirmó, y aseguró que las alianzas exhibidas en la constitución del Parlamento fueron "para lograr la pluralidad" de la mesa, no prefiguran acuerdos más estables.
De opinión contraria se mostró Mercedes Fernández, portavoz del PP, que lamentó que no se optara por su candidata, que encarnaba "la renovación". "Fuimos transparentes, no entramos en pactos de despacho", afirmó, y criticó el resultado de las votaciones, que a su juicio da una preeminencia indebida a grupos con menos representantes, como IU y Ciudadanos. "No ha sido un buen comienzo", aseguró.
Gaspar Llamazares (IU) alabó la pluralidad, aunque lamentó que se tuviera que recurrir al voto y no a acuerdos "porque hay gente muy cabezona, necia, que no reconoce la representación del diálogo", en referencia al PP.
Emilio León (Podemos) destacó que ellos no llegaron a acuerdos "a espaldas de la ciudadanía", que van a renunciar al plus de salario que supone la Mesa y que "otros sí llegaron a pactos", mientras que Cristina Coto (Foro) considera que "se ha pervertido el orden de la cámara".
