Un partido "más transparente", que sea capaz de "conectar con las preocupaciones de los ciudadanos", "comunicar mejor" y transmitir, sobre todo, un mensaje ante la próxima cita electoral: que Mariano Rajoy ha logrado mejorar la situación de un país "que se encontró en quiebra" y que, pese a la percepción de "los pesimistas", ha cumplido "la mayor parte de su programa".

Este es, en síntesis, el mensaje que la presidenta del PP, Mercedes Fernández, lanzó ayer a los dirigentes regionales de su partido, en el último comité ejecutivo autonómico antes de las vacaciones de verano. Y les advirtió que, vacaciones, por turnos: los diputados y los concejales deberán coordinarse para que los cargos electos populares acudan a ferias, citas culturales y sociales, manteniendo la presencia entre los asturianos.

Para llevar adelante este programa de "peinar el territorio" ante las próximas elecciones generales, "que esperamos ganar", Mercedes Fernández ha reorganizado a su equipo, creando tres nuevas vicesecretarías: la diputada Emma Ramos llevará la nueva vicesecretaría de Políticas Sociales; el también diputado Pedro de Rueda, la de empleo, también de nueva creación, y el actual portavoz del partido en Carreño, José Ramón Fernández, será vicesecretario de Transparencia, Buenas Prácticas y Coordinación Política. Los tres se integrarán en el comité de dirección del PP asturiano. Además, Luis Venta Cueli, diputado y vicesecretario de Organización, será el encargado de coordinar la campaña electoral. Mercedes Fernández aprovechó la celebración del comité ejecutivo de su partido para argumentar porqué decidió presentar su candidatura a la presidencia del Principado: "Era necesario que los votantes de centro derecha tuvieran un reflejo en el Parlamento; hemos logrado que la sociedad asturiana nos visualizara como lo que somos, una alternativa de gobierno con un programa estructurado y sólido".

Fernández volvió a insistir en un mensaje que quiere que sus dirigentes transmitan: que las promesas fiscales de Rajoy se harán realidad en 2005 y 2016, con un ahorro que estimó en 462 euros por contribuyente, en cumplimiento de su programa.