La defensa de los puertos asturianos -El Musel y Avilés- en favor de la economía asturiana centró parte del discurso de Félix Baragaño. El presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, entidad organizadora de la Feria de Muestras, dejó claro que "no caben más demoras en los accesos por autovía a las instalaciones portuarias y a la Zalia, a la entrada en funcionamiento de la regasificadora, a la recuperación de la autopista del mar y a la potenciación de la terminal de contenedores".

En su reflexión sobre las infraestructuras, el empresario hizo mención a la continuación de la autovía de Grado a La Espina hasta enlazar con la A8, a la necesidad de disminuir los costes de la conexión aérea de Asturias con Madrid y, ya en el ámbito ferroviario, "a la apertura al tráfico, al menos, de uno de los túnles de la variante de Palajres, y la licitación y construcción del tramo León-La Robla". El guiño gijonés fue su petición de prioridad absoluta a la tramitación de un Plan General de Ordenación que insufle vida al sector de la construcción.

Más allá de estas peticiones territoriales, el presidente de la Cámara de Comercio de Gijón dejó sobre la mesa tres conceptos "a preservar, favorecer y potenciar: España como proyecto nacional dentro de Europa, el empresario como motor de nuestro modelo social y el papel protagonista y responsable de los políticos". Baragaño también incidió en la necesidad de incentivar la natalidad y dar solución al coste de la energía "un problema motivo de incertidumbre empresarial".