El proyecto de Presupuestos Generales del Estado presentado con la mayor antelación en toda la historia democrática de España -en agosto y a escasos meses de las elecciones- recoge un incremento del gasto social del 3,8%; una caída de las prestaciones por desempleo de 5.500 millones de euros (-21%), una subida del 0,25% en las pensiones, cuyo pago se lleva 38,5 de cada cien euros de los presupuestos, y un incremento del 4,9% del gasto de personal, con una subida salarial del 1% para los empleados públicos. Además, esta partida incluye la recuperación del 50% de la paga extraordinaria que fue suprimida en 2012 por el Ejecutivo de Rajoy, así como el incremento de la financiación del régimen de mutualidades.

Las cuentas parten de un límite de gasto no financiero de 123.394 millones de euros, lo que supone un descenso del 4,4% respecto al techo de 2015. Esta cifra se basa en una previsión de ingresos tributarios por valor de 193.520 millones. Además, incluyen un objetivo de déficit para el Estado de 25.134 millones (2,2% del PIB), una financiación de las administraciones territoriales a través del presupuesto de gastos de 33.797 millones y unos ajustes de contabilidad nacional de 2.716 millones. Las transferencias del Estado a las comunidades autónomas aumentan un 3,13% en el proyecto de Presupuestos para 2016 con respecto a este año, situándose en 23.504,95 millones de euros.

Por lo demás, el Gobierno ha decidido aplicarse el próximo año la subida salarial del 1 por ciento destinada a los funcionarios, con lo que el próximo presidente, sea Mariano Rajoy u otro, percibirá en 2016 una retribución de 78.966,96 euros, lo que supone 6.580,58 euros brutos al mes, sin pagas extraordinarias. La dotación prevista para los expresidentes del Gobierno se mantendrá en 223.740 euros.

Partidos políticos

El Gobierno central destinará en 2016 un total de 99,61 millones de euros a la financiación de los partidos políticos y a sus gastos electorales. Además, reserva otros 22,2 millones para sufragar la celebración de las elecciones autonómicas en Galicia y en el País Vasco del próximo año. Esos casi 100 millones para los partidos supone una reducción de un tercio con relación al presente año.

El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, aseguró ayer que el Presupuesto de 2016 insiste en una política económica que "ha funcionado en España y que está sacando al país de la crisis". Además, según dijo, las cuentas son el reflejo de un programa económico con el que se pretende afianzar la recuperación y de una política "creíble y fiable" que el Ejecutivo se compromete a mantener si gana las próximas elecciones generales. "Si hay algo que no puede descuidarse es el área económica", indicó.

Montoro destacó que el Gobierno aspira a que no aumente la presión fiscal en España y anunció que "en cuanto sea posible" habrá una nueva rebaja del IRPF. El Ministro añadió que para 2016 prevé dedicar a las políticas activas de empleo 5.215 millones, casi el 10% más que en 2015. Según indicó, el gasto de los ministerios alcanzará los 40.476 millones, el 2,6% más que en 2015, y la dotación para las políticas de investigación, desarrollo e innovación civil se situará en 5.793 millones.