La ya veterana del escenario del pabellón ferial de LA NUEVA ESPAÑA, Carmen Ordiz, confirmó una vez más que su amor por la música lleva con ella desde bien pequeña. "Como decía mi madre, empecé a cantar antes que a andar". Entre risas Carmen Ordiz no pudo dejar de transmitir que su pasión por la música creció con ella. "Llevo cantando desde los trece años y desde hace catorce lo hago ya profesionalmente; canto de todo, desde copla a ranchera y boleros, todo menos ópera", explicó.

A los trece años ganó un concurso de canto, ahora pertenece al grupo cultural "Amigos de las canciones de siempre", con el que va por toda Asturias recordando "las canciones de toda la vida".

La cantante saltó al escenario con la energía a la que tiene acostumbrado al público y se arrancó con cuatro canciones variadas: "Pero vas a extrañarme", "Y nos dieron las diez", una versión ranchera de Rocío Durcal de la conocida canción de Joaquín Sabina; "Se nos rompió el amor" y "Tarde". Además, trajo consigo una sorpresa: un grupo de jóvenes alumnas de las "Rumberas de Paqui Oliva" que salieron al escenario en tres ocasiones, para deleitar al público con su arte.

Hora y media más tarde el relevo lo tomaron Marina López, Isidoro Alconada y Patricia Pariente con una sesión de canción ligera. José Manuel García los presentó como "un espectáculo a través de estrofas con el objetivo de la supervivencia de la vida de la copla, siguiendo los pasos de Farina, Rocio Jurado y Marifé de Triana".

Algunas de las canciones que interpretaron son "Herencia gitana", "Mi Salamanca" y "Muero por la copla". Los aplausos se sucedieron hasta que la actuación finalizó.