El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) "sigue trabajando" con el objetivo de concluir y abrir al tráfico este año la variante de Pajares, algo que técnicos de la obra ven ya "imposible" de cumplir a la vista del estado de los trabajos y de la necesidad de que, cuando concluyan, arranque un periodo de pruebas y homologaciones que, según dicen, se extenderá durante varios meses. Pese a esta advertencia, un portavoz autorizado del gestor ferroviario, dependiente de Fomento, aseguró ayer a LA NUEVA ESPAÑA que oficialmente no se ha producido cambio alguno en el plazo ofrecido por la ministra Ana Pastor durante sus últimas visitas a la región. La Variante, afirmó, estará culminada este año si no se presentan nuevos contratiempos técnicos.

El mismo portavoz del Adif confirmó que la Variante es una obra de una "gran complejidad" y que las constructoras han tenido que hacer frente a un "cúmulo de problemas" desde que José Luis Rodríguez Zapatero, entonces presidente del Gobierno, asistió al inicio de la excavación de los grandes túneles, de 25 kilómetros de longitud cada uno de ellos, en el mes de julio de 2005. En todo caso, este responsable del gestor ferroviario asegura que la mayor parte de las contingencias están superadas y que, en principio, no deberían de presentarse más hasta la conclusión de los trabajos.

Ana Pastor ha garantizado en varias ocasiones que hay dinero suficiente para concluir las obras. Las cuentas estatales para 2016 reservan una partida de 236,5 millones de euros para un proyecto que, globalmente, supera ya los 3.500 millones de euros de coste. Técnicos que conocen a la perfección la actuación y la marcha de los trabajos en los túneles de Pajares confirman que el presupuesto no es el problema. Que el problema radica en el tiempo, insuficiente a todas luces para acabar las labores antes de que concluya el presente año.

Las vías y las catenarias están sin instalar en buena parte del trazado; los trabajos para revestir el túnel y evitar las filtraciones de agua, que llegaron a ser masivas, tampoco han concluido; también siguen en marcha las obras para la contención de la ladera inestable de las inmediaciones de Campomanes y están pendientes las instalaciones de seguridad, control y protección civil. "No hay tiempo para abrir este año", subrayan los expertos consultados, que también llaman la atención sobre un periodo de pruebas que podría ocupar hasta seis meses. "En el AVE de León llevan testando el tendido dos meses y eso que no hay ningún túnel que se asemeje ni de lejos a uno de los de Pajares", subraya un profesional que conoce bien la Variante.

Pese a todo, el Adif insiste en que su "objetivo" no ha variado y que tanto este organismo como las empresas contratadas trabajan para cumplir el plazo.