El Presupuesto regional de 2016 está prácticamente hundido antes de iniciar siquiera su travesía en la Junta General del Principado. Las siete horas de la comparecencia de la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, ante el parlamento asturiano pusieron de manifiesto que sacar adelante unos nuevos Presupuestos para el próximo ejercicio será una misión imposible para el Ejecutivo socialista, que ayer sólo encontró disposición al acuerdo en el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, que ya resultó clave para sacar adelante la investidura de Javier Fernández el pasado mes de julio.

La consejera de Hacienda aprovechó la última de las ocho comparecencias del Gobierno regional para hacer un llamamiento al diálogo, pero sobre todo al acuerdo en dos cuestiones clave para Asturias a corto y medio plazo: el Presupuesto del próximo año y la reforma del modelo de financiación autonómica. "Vamos a poner toda nuestra voluntad y trabajo para sumar acuerdos", afirmó Carcedo, quien defendió que "no es lo mismo el Presupuesto que la prórroga, ni en tiempos ni en recursos. Buscaremos el consenso con todas las fuerzas ". Un discurso que la consejera de Hacienda se verá obligada a repetir, no sólo en el debate presupuestario de este año sino a lo largo de toda la legislatura, porque la Junta General, más atomizada y plural, no tiene trazas de ser un escenario abonado para el consenso sino más bien todo lo contrario.

El tono de las preguntas realizadas por los portavoces de los grupos de la oposición ya dio pistas sobre su postura reacia, salvo en el caso de IU, a que el proyecto de Presupuestos del Gobierno llegue a buen puerto. De hecho, el propio portavoz de la coalición, Gaspar Llamazares, fue el primero en advertir que la prórroga más que un riesgo potencial es un peligro inminente. "El fraccionamiento, que no la pluralidad, puede ser estéril. Necesitamos sumar escaños para llegar a la mayoría (...) No hay muchas condiciones para el compromiso", reconoció el portavoz de IU.

El portavoz de Ciudadanos, Ignacio Prendes, abrió las puertas al diálogo sobre las cuentas del próximo año, pero puso condiciones y advirtió que la política fiscal de los socialistas y de la coalición supondrá un obstáculo insalvable. "No cabe duda de que es deseable que haya Presupuesto en 2016, pero a nosotros no nos vale cualquier presupuesto. No facilitaremos un cheque en blanco. El esquema presupuestario de Asturias, el círculo vicioso de obtener más ingresos con impuestos y deuda reduciendo la inversión, hay que cambiarlo", exigió Prendes. Y ahí acabaron las posturas más proclives a un posible diálogo.

El PP dejó claro a las primeras de cambio que el entendimiento presupuestario con el Ejecutivo socialista ya está caducado. "Este gobierno y usted, Consejera, tienen un enorme problema de credibilidad, porque está haciendo promesas de volver a hacer lo que no se hizo en la legislatura anterior. Sus planes anuncian unos cuantos años más de letargo. Su política fiscal es un desastre para Asturias", reprochó el diputado José Agustín Cuervas-Mons, que no pudo ser más claro al dictar sentencia. "Habla de diálogo y se lo agradezco, pero tiene muy difícil el acuerdo en materia de Presupuestos", manifestó el también vicepresidente de la Cámara.

Podemos puso tierra de por medio con Dolores Carcedo como ya lo había hecho antes con los otros siete consejeros y primero con Javier Fernández en el debate de investidura. "Sus prioridades están meridianamente claras, cumplir nuestras obligaciones financieras con quienes nos prestan dinero para que nos endeudemos, esos mismos que luego nos hipotecan de por vida (...) Cuanto más se miran los números, más borrosas se ven las personas", sostuvo su diputado Enrique López, que endureció el discurso al acusar al PSOE "de permitir la fuerte penetración de empresas privadas en la Administración asturiana, con prácticas de compraventa que han llevado a casos de corrupción extrema", una práctica que vinculó a "las puertas giratorias" de las que dijo que "se compra a políticos para hacerse con contratos públicos". Cristina Coto, de Foro, tachó de "profundo error" la política fiscal del gobierno asturiano, calificó de "continuista" la estrategia anunciada por la Consejera, y rechazó que "los Presupuestos sean buenos en sí mismos. Ahí está el ejemplo de este año".

Este es el escenario que encontrará el Gobierno regional cuando registre el proyecto presupuestario para 2016, un ejercicio que parece abocado a la prórroga.