La descoordinación que lastra los servicios de cercanías de Asturias también se extiende a la relación entre el Alvia y la red de trenes de proximidad del centro de la región. El último convoy del día procedente de Madrid llega a Oviedo a las once menos cinco de la noche, cuando ya no hay enlaces ferroviarios para desplazarse ni a Avilés ni a Siero, que son el tercer y cuarto concejo, respectivamente, más poblados del Principado. Y no solo eso. A esa hora tampoco hay trenes a Llanera, Langreo, Infiesto o Grado, ni existe la posibilidad de realizar esas conexiones en autobús.
El último de los cuatro servicios de Alvia que unen Madrid con Asturias los días laborables llega a Chamartín procedente de Alicante, parte de la capital hacia la región a las 18.30 horas y tiene la llegada a la terminal ovetense de la calle Uría programada para las 22.53 horas. Según la programación oficial de Renfe, el último cercanías desde Oviedo a Avilés sale veinte minutos antes, a las 22.32 horas, y el último servicio de Alsa entre ambas ciudades hace lo propio a las once de la noche, por lo que los viajeros del Alvia que quieran coger ese autobús dispondrían únicamente de siete minutos para cambiar de estación. Y eso en el hipotético caso de que el tren de Madrid entre en Oviedo con puntualidad británica. Los avilesinos del Alvia tampoco llegan a tiempo a Gijón para coger un tren de Feve ni un autobús de Alsa.
En el caso de Pola de Siero, localidad conectada con Oviedo por la línea de ancho métrico de Feve, el último tren de cercanías del día tiene la salida a las 22.35 horas, también veinte minutos antes de que llegue el Alvia de Madrid. El servicio de Alsa hacia la capital sierense concluye a las diez y media de la noche, con lo que, al igual que sucede para ir a Avilés, los viajeros que quieran continuar viaje al llegar de Madrid se ven obligados a utilizar un vehículo privado o un taxi.
Hacia las estaciones de Llanera y Lugones, los últimos servicios del día tienen la salida a las 22.45 horas, por lo que tampoco enlazan con el Alvia de la tarde procedente de Madrid. En idéntica situación están el resto de rutas de cercanías asturianas. El último tren de Oviedo a Infiesto parte a las 21.35 horas, a Pola de Laviana a las 22.15, y a Langreo también a las 22.15 horas.
La falta de coordinación del Alvia con los trenes de cercanías es especialmente grave en el caso de Avilés, dado que la tercera ciudad de Asturias también carece de conexión ferroviaria con Oviedo para llegar con el tiempo suficiente para coger el primer tren de la mañana en dirección a Madrid. El Alvia sale de la calle Uría a las 07.27 horas de la mañana y el primer cercanías desde Avilés llega a la estación a las 07.19 horas, un horario demasiado ajustado como para garantizar el cambio de tren. Los avilesinos tampoco disponen de enlace con Gijón para coger allí ese primer Alvia de la jornada, con salida a las siete de la mañana. Y es que el primer tren de vía estrecha entre ambas ciudades parte a las siete menos diez.
Los viajeros de Mieres que pretendan usar un cercanías para coger el primer tren del día hacia Madrid llegarán a Oviedo con el tiempo justo para subir al Alvia. De acuerdo con los horarios oficiales de la operadora, la entrada en la terminal de la calle Uría del servicio más madrugador desde la cabecera del Caudal está programada para las siete y cuarto de la mañana, con el tiempo justo para que los viajeros realicen el cambio de tren. Más fácil lo tienen los pasajeros de Langreo, que pueden estar en la capital del Principado poco antes de las siete y diez de la mañana. Sin embargo, los de Grado tampoco llegan a tiempo. El primer tren desde la villa moscona llega a Oviedo a las 07.29 horas.
El Principado ha planteado la puesta en marcha de un plan de coordinación de los servicios ferroviarios de la región que incluya la red de ancho métrico, la ibérica, los servicios de proximidad y los trenes de larga distancia a Madrid, Barcelona o Alicante.
