Con el PP no hay diálogo, y con Podemos parece que queda poco margen para el encuentro. La tramitación presupuestaria, que ayer inició su fase de comparecencias por consejerías en la Junta, parece abocada a chocar con la negativa de los dos grupos de oposición mayoritarios a dar su respaldo al proyecto presentado por el Gobierno. En las dos comparecencias que se celebraron ayer -de las consejerías de Presidencia y de Empleo- el PP se mostró abiertamente hostil, mientras que Podemos dio muestras de suspicacia ante las propuestas socialistas. Como ejemplo, la acogida que tuvo la creación de una Oficina de Buen Gobierno y Lucha contra la Corrupción. La iniciativa fue presentada por Guillermo Martínez, consejero de Presidencia, y avalada por IU, cuya representante, Concha Masa, destacó que era fruto de las aportaciones de la coalición al Presupuesto. Si era un guiño a Podemos, que llevaba en su programa la creación de una unidad anticorrupción integrada por funcionarios, pincharon en hueso: la portavoz de la formación morada, Lucía Montejo, puso en duda la independencia de esa futura entidad y acabó calificándola de "chiringuito".

Pese a que parece que no habrá mucho recorrido para el proyecto presupuestario, los diputados asturianos no escatimaron horas para analizar el documento presentado por el Consejo de Gobierno. Las comparecencias comenzaron a las nueve de la mañana y se prolongaron hasta las ocho de la tarde, con un receso para comer.

Por la mañana, Guillermo Martínez presentó los números de su consejería, Presidencia y Participación. Su presupuesto se eleva a 127 millones, con la mayor parte de los recursos destinados a sostener el sistema judicial asturiano (88,1 millones), y un esfuerzo especial, dijo el consejero, en la lucha contra la violencia de género (1,6 millones de euros) y en iniciativas de transparencia y lucha contra la corrupción, con la creación de la citada oficina que tan fría acogida obtuvo por parte de Podemos. En Justicia, la principal inversión, 400.000 euros, se irá a la reforma del Juzgado de Luarca, y habrá otros 400.000 euros para obras en otros edificios. No hay nada previsto para reunificar las sedes judiciales de Oviedo (más allá de la elaboración de un plan de infraestructuras). En Justicia, habrá un gran esfuerzo para la renovación tecnológica, dotaciones para implantar el expediente electrónico (destinado a desterrar el papel de los juzgados, aunque Martínez destacó que no se hará de sopetón) y un refuerzo de personal de 9 personas para hacer la transición.

Por la tarde, le tocó el turno al consejero de Empleo, Industria y Turismo, Francisco Blanco, que presentó un presupuesto de 184,9 millones. El plan de retorno del talento (300.000 euros), el plan para reconvertir en cooperativas empresas en crisis (800.000 euros) o el nuevo tique de innovación para los autónomos fueron algunas de las novedades que destacó el consejero, que entre las ayudas dirigidas a entidades sin ánimo de lucro (que pasan de 3 a 5,3 millones) destina un 62,4 por ciento a la investigación. Se retomará el proyecto Innocámaras, para fomentar la innovación en colaboración con las Cámaras de Comercio y se incrementará la partida del programa Asturias para centros tecnológicos, que pasa de 2 a 3 millones.

No convenció a la oposición. Con el PP se enzarzó en una discusión sobre los recortes (si la culpa es del gobierno central, o de la gestión socialista), mientras que Ciudadanos y Podemos le reprocharon su continuismo. La diputada Lorena Gil insistió, además, en que la estructura de la consejería oculta "una administración paralela", empresas "satélites" y beneficia a sindicatos mayoritarios, patronal y grandes empresas, en lo que definió como "redes clientelares".

IU reclamó "a los grupos de izquierda en la Cámara" -es decir, Podemos- que reflexione sobre si prefiere una prórroga o un presupuesto "con un giro a la izquierda", y advirtió que pese su apoyo a las Cuentas no está cerrado "hasta que se debata la última enmienda"; el PP cuestionó la capacidad del Gobierno asturiano de sacar a Asturias "de la cola. Foro también se mostró crítico y criticó el recorte de las previsiones en industria y empleo, y Ciudadanos puso en duda el modelo de región que se refleja en el documento. El Presupuesto, pues, no arranca con buen pie.