La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Hacienda reclama un millón de euros tras auditar investigaciones de la Universidad

Empresas contratadas por el Ministerio exigen una justificación extra de los gastos en proyectos científicos de hace más de una década

Santiago Álvarez García. IRMA COLLÍN

Empresas contratadas por el Ministerio de Hacienda auditan desde hace tiempo los proyectos de investigación universitaria varios años después de terminados. Esa política que está consumiendo a la comunidad investigadora en el desánimo obliga a un proceso de justificación adicional de los gastos destinados a proyectos con financiación pública. En ese contexto el Estado le reclama ahora a la Universidad de Oviedo entre 800.000 euros y un millón de euros. Lo avanzó ayer el vicerrector de Planificación Económica, Santiago Álvarez García, en el transcurso de las comparencias realizadas en el marco de la Comisión de Hacienda para analizar el proyecto de presupuestos del Principado para 2016.

"Se están haciendo auditorías en profundidad de los gastos realizados por los grupos de investigación y, en algunos casos, con una exigencia que en su momento no existía", remarcó el representante del equipo rectoral. Esa reclamación obliga a devolver unas cantidades que, para este año, se situaría en una factura próxima al millón de euros, principalmente porque se refiere a proyectos de investigación de hace más de una década donde se exige "el pago de intereses de demora, que son mayores que la propia devolución" de los gastos considerados por el Ministerio de dudosa justificación.

Cuando un grupo de investigación recibe financiación para un proyecto a varios ejercicios normalmente se compromete a presentar anualmente un informe técnico del trabajo desarrollado y un informe económico en el que se concretan los gastos en que se ha incurrido. Normalmente esos fondos se destinan a la compra de material, desplazamientos de trabajo -por ejemplo, para la presentación en congresos de los resultados de la investigación- o para la contratación de personal de apoyo. Año a año se supera una evaluación con todas esas justificaciones y al término del proyecto deben superar una evaluación final. Si no fuera positiva, se podría dar el caso de tener que devolver total o parcialmente la financiación recibida. El problema es que las auditorías realizadas ahora corresponden a proyectos de investigación de hace una década, con el inconveniente que representa justificar esos gastos.

A este inconveniente sumó el vicerrector de Planificación Económica el hecho de que en los últimos años se haya reducido de forma "bastante sustantiva" la financiación para investigación procedente de diferentes administraciones. "Quizá haya sido la más afectada por los recortes de la crisis", lamentó. "Nos hubiera gustado avanzar más rápidamente", valoró sobre el desarrollo de las negociaciones para definir el contrato-programa con la Administración regional. "Esperamos que el próximo año se pueda avanzar en una financiación estable para la investigación", concluyó.

Compartir el artículo

stats