El turismo rural asturiano aún tiene capacidad de crecimiento y busca su relanzamiento con la captación de más clientes extranjeros y la comercialización de productos innovadores con un valor añadido mayor y compartido por distintas empresas.

Asturias materializó esta mañana en el stand del Principado en la Feria Internacional del Turismo (Fitur) la puesta en marcha del cluster de turismo rural, una agrupación de empresas del sector que reúne a 67 entidades de alojamiento, agencias de viajes, turismo activo, marketing, publicidad o restauración con el propósito de actualizar entre todas la oferta turística de este subsector que este año celebra en el pabellón asturiano en Fitur el trigésimo aniversario del origen de esta modalidad turísticoa en España, en 1986 en el hotel rural de La Rectoral, en Taramundi.

La presidenta del cluster, Mayte Jiménez, hizo hincapié en que el turismo rural asturiano tiene futuro además de pasado y se propuso "generar productos tecnológicos innovadores potenciando una línea diferente de trabajo que comparta sinergias entre empresas de diferentes actividades y con la administración para poder "adaptar la oferta a los nuevos tiempos" y a los nuevos perfiles de la clientela.