Muchos años después, ante la posibilidad de no salir embestido, Mariano Rajoy habría de recordar aquella frase ante Felipe Juan Pablo Alfonso de Todos los Santos de Borbón y Grecia, Felipe VI de España, para decirla en negativo: "Estoy en condiciones de no ofrecer al Rey lo que el Rey me ha pedido". Así la primera vez y así la segunda, resonando la frase de Tato y pasando de Mariano a "Marianono" y a "Mariatampoco". Para evitar que cantara el gallo, Felipe VI no le convocó por III vez y así evitó que fuera "Mariano y no y no". Y llamó a Pedro Sánchez Pérez-Castejón, secretario general del PSOE, que contra la tradición de Pedro, afirmó a la primera.