El candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, está dispuesto a perdonar un total, o al menos parte, de los 114.927 millones de euros que deben las comunidades autónomas si logra los apoyos suficientes para sacar adelante su investidura. Las negociaciones entre el líder socialista y Compromís ponen encima de la mesa su disponibilidad a asumir el pago de las cantidades que el Gobierno de Mariano Rajoy prestó a las comunidades a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). La decisión, aunque sea para todas las comunidades que se acogieron a la financiación adicional, beneficia a aquéllas que por su elevada deuda motivaron la creación del mecanismo compensatorio, como Cataluña, Valencia y Andalucía. La deuda asturiana en los fondos de financiación extra alcanzan los 1.500 millones.
El Gobierno tripartito de Valencia, formado por los socialistas valencianos, Compromís y Podemos, tiene en su elevada deuda autonómica uno de sus principales caballos de batalla y los diputados de Compromís en el Congreso están dispuestos a hacer valer sus escaños para aminorar una pesada carga financiera que compromete la sostenibilidad de sus servicios públicos esenciales. El compromiso de Pedro Sánchez consistiría en asumir los vencimientos, mediante una refinanciación con los acreedores, del rescate que recibieron las autonomías para poder pagar el "día a día" en los peores años de la crisis. En total, el Fondo de Financiación ha repartido 114.927 millones de euros, aunque el grueso de esa cantidad fue para Cataluña (39.461 millones), Valencia (27.112 millones y Andalucía (18.706 millones de euros. Esas tres autonomías se llevaron casi tres cuartas partes de la "tarta" de esa financiación adicional.
Las cifras de Asturias
El Principado se incorporó, ya bastante avanzada la crisis, a ese fondo, ya que inicialmente consiguió cerrar operaciones de crédito con distintas entidades del sector privado. Asturias tenía al inicio de la crisis, en 2008, una deuda total de 770 millones, una cantidad que prácticamente se ha multiplicado por cinco a lo largo del pasado año, cuando el pasivo alcanzó los 3.788 millones de euros. De ese incremento de la deuda, en torno a unos 1.500 millones de euros llegaron de diferentes instrumentos de financiación extra habilitados por el Gobierno de Rajoy, tales como el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), el Fondo de Financiación a Comunidades Autónomas y el mecanismo de pago a proveedores. Pese a ese incremento, Asturias se mantiene en el grupo de las autonomías con menor nivel de endeudamiento, sólo por detrás de Madrid, Canarias y País Vasco.
De materializarse la condonación de la deuda que negocia Sánchez con los nacionalistas valencianos, Asturias aligeraría su pasivo en cerca de un 40 por ciento y pasaría de los 3.788 millones actuales a menos de 2.300 millones, una rebaja considerable que situaría al Principado en los niveles de endeudamiento de 2011.
El Gobierno regional cree que cualquier concesión en forma de condonación de la deuda o una medida similar, que luego el Estado refinanciaría ante Europa, debe de abordarse dentro de una negociación global, vinculada al sistema de financiación. "Si eso se plantea, habrá que abordarlo en el marco de negociación de la reforma de la financiación autonómica y, en ese ámbito, el Gobierno del Principado participará siempre en defensa de los intereses de Asturias", manifestó el presidente del Principado, Javier Fernández.
