La Sociedad Mixta de Gestión y Promoción del Suelo (Sogepsa) no puede hacer frente a la sentencia que le condena a pagar cerca de nueve millones de euros a la UTE que urbanizaba el polígono de Bobes (Siero). Y ello pese a que tiene unas existencias de unos 200 millones de euros en solares ya urbanizados o en fase de transformación, tanto para uso residencial como industrial, pero a los que no logra dar salida desde el estallido de la crisis económica. La entidad trató de llegar a un acuerdo para afrontar el pago a la UTE con parte de esos terrenos, pero no tuvo éxito, por lo que decidió comunicar el preconcurso de acreedores.
La mayor parte de esas existencias, en torno al 75% del total, corresponden a solares industriales, entre ellos los de Lloreda (Gijón) y Bobes (Siero), que son los que han llevado a Sogepsa a la actual situación de asfixia económica por las enormes dificultades que se ha encontrado para sacarlos adelante. Según los datos facilitados por la sociedad a la Junta General en 2013, el Principado avaló con algo más de 111 millones de euros esas operaciones, una cantidad que queda comprometida por las graves dificultades actuales.
La gestión de Sogepsa en la etapa de Vicente Álvarez Areces incluyó varias operaciones controvertidas, que fueron desveladas por LA NUEVA ESPAÑA, en las que se pagó por terrenos bastante más de lo previsto en las tasaciones.
Así, por ejemplo, en 2005 la entidad abonó a una inmobiliaria por la "parcela 51" de Prado de la Vega (Oviedo) 9 millones de euros por un terreno cuyo precio no sobrepasaba los 3,8 millones, según las tasaciones oficiales efectuadas al año siguiente.
El caso de Roces
En Roces (Gijón), Sogepsa pagó por tres parcelas entre 1,5 y 2,3 millones de euros por encima de la valoración y a un mes vista de la firma de las actas de ocupación, lo que dejaba vía a la expropiación forzosa de esos solares. La CUOTA fijó un precio de 43,32 euros el metro cuadrado, pero se pagó a 87 el metro.
Además, Sogepsa abonó a una inmobiliaria 1.371.829,91 euros por 78.195,05 metros cuadrados de terreno para un polígono industrial en Sariego, cuando la tasación oficial para la expropiación forzosa, que había sido aprobada dos años antes, establecía el valor de estos terrenos en 485.316,79 euros. Por cierto, la empresa que vendió las tierras a Sogepsa las había adquirido a sus propietarios tres días antes de firmar las actas de ocupación.
La plataforma de afectados por las expropiaciones de Sogepsa en varios municipios de la región viene denunciando desde hace años numerosas irregularidades en la gestión de la sociedad.
